La reforma laboral se embarulla: sin texto ni foto a horas de la aprobación
Antonio Garamendi se borra de la tradicional foto de familia ante la amenaza de que el anteproyecto cambie con las enmiendas de los grupos en el Congreso
El acuerdo a tres bandas para sacar adelante la nueva reforma laboral se ha embarrado. A pesar de que el Gobierno, la patronal y los sindicatos han sumado fuerzas para apoyar conjuntamente el anteproyecto de ley, la buena sintonía se ha resquebrajado por la falta de un texto definitivo a escasas horas de su aprobación y por la previsible ausencia de la CEOE en la tradicional foto de familia.
El Ministerio de Trabajo llevará este martes su medida estrella al Consejo de Ministros para poder cumplir con el calendario establecido por Bruselas. Sin embargo, a última hora del lunes el documento completo todavía no se había presentado a los agentes sociales, que llevan nueve meses negociando cada apartado del nuevo marco laboral español.
El malestar generado entre los participantes de la negociación colectiva se mostrará en el encuentro donde habitualmente se escenifican estos grandes acuerdos. El presidente de los empresarios, Antonio Garamendi, no acudirá esta vez a la cita en Moncloa, ante la amenaza de que el acuerdo al que han llegado se vea condicionado durante la negociación parlamentaria, según ha publicado El Mundo.
No se trata de un hecho habitual. El presidente de los empresarios ha estado en todos los grandes anuncios que han salido de la mesa colectiva en lo que va de legislatura. Sí que apareció en las fotos posteriores a los acuerdos para prorrogar los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) o en el pacto de las pensiones, donde posó con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y los líderes de los sindicatos.
La patronal no quiere hacerse una foto si finalmente tiene que bajarse del barco porque alguno de los grupos políticos logra sacar adelante en el Congreso enmiendas que modifiquen el texto original del acuerdo. Y menos, después del malestar que ya ha provocado el pacto entre algunas facciones de la CEOE que se abstuvieron en la votación definitiva.
La CEOE no está dispuesta a cambiar ni una coma del acuerdo
La ausencia de Garamendi en la foto de familia mostrará el descontento del presidente de los empresarios ante un hipotético cambio del texto que ha sido acordado en la negociación. La minoría parlamentaria del Gobierno obliga al Partido Socialista y a Unidas Podemos a convencer a algunos de sus socios por excelencia para aprobar la nueva ley, pero la mayor parte ha anunciado que no tragará con un texto ya completamente cerrado.
En su circuito por los medios de comunicación desde que se anunció el acuerdo a tres bandas, Garamendi ya ha advertido que su posición es inamovible e incluso ha amenazado en varias ocasiones con levantarse de la mesa colectiva para futuras negociaciones si la reforma laboral cambia. «Lo pactado no se toca. Llevamos nueve meses. Muchísimo trabajo. 14 horas diarias muchos días», explicó este lunes en Radio Nacional.
Uno de los puntos calientes son las peticiones del Partido Nacionalista Vasco (PNV) para dar primacía a los convenios autonómicos. La petición no cuenta con el visto bueno de los empresarios que lo consideran una línea roja, pero la aritmética parlamentaria coloca a la formación de Aitor Esteban como uno de los principales sostenes del Ejecutivo.
«Rompería la economía de mercado. Nos generaría 17 problemas diferentes. Nosotros no compartiríamos ese criterio», afirmó Garamendi.