La rebaja del IVA falla al aplacar la subida de los alimentos a semanas de decidir su prórroga

Los alimentos cerraron mayo con un alza del 12%, moderándose pero aún muy altos. "Los precios se han comido la rebaja del IVA", apuntan desde Funcas

Vista de una frutería en el Mercado Maravillas de Madrid. EFE/ Javier Lizon

Vista de una frutería en el Mercado Maravillas de Madrid. EFE/ Javier Lizon

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Era la medida estrella y, aunque se dejó algunos comestibles fuera, como la carne o el pescado, la rebaja temporal del IVA a los alimentos fue la apuesta del Gobierno de Pedro Sánchez para atenuar el impacto de la subida de los precios en la cesta de la compra. En diciembre, cuando los precios de los alimentos estaban disparados en un 15,7% (en comparación, el IPC general era casi tres veces inferior, el 5,7%), el Ejecutivo apostó por recortar del 4% al 0% el IVA de algunos básicos, como la harina, la leche o la fruta, y del 10% al 5% el de aceites y cereales.

Ahora, seis meses después y con la inflación de los alimentos en el 12% (la general es del 3,2%), su prórroga está en el aire y si bien la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, ha insistido en que se mantendrá «siempre que no lleguemos a niveles de precios adecuados», lo cierto es que los alimentos que disfrutan de esa prórroga siguen disparados.

Han moderado su subida en los seis meses de aplicación, sí, pero en parte porque se benefician de un ‘efecto escalón‘ por las grandes alzas que experimentaron el año pasado. Así, la rúbrica de cereales y derivados en la estadística del IPC subió un 15,5% en mayo, comparado con el mismo mes del año anterior. Pero es que en ese mismo mes de 2022 ya experimentaron un aumento del 16,3%. Sí es cierto que este subgrupo, en concreto, se ha moderado desde que alcanzó su pico el pasado noviembre, cuando los precios fueron un 22,9% más caros.

La leche, los huevos y la carne, por los aires

El caso de la leche, también sujeta a la rebaja al 0%, es similar. Ha aumentado un 23,6% en solo un año, pero en mayo de 2022 ya subía un 16,5%. Lejos quedan, es cierto, niveles de incremento del 37,2% registrados en diciembre, justo antes de que el Ejecutivo decidiera aplicar la rebaja, que entró en vigor el 1 de enero.

Los precios de la alimentación siguen disparados también en el caso de las legumbres y hortalizas frescas (15,8%), las patatas y sus preparados (17,9%) o los huevos (13,2%). Otros alimentos que no disfrutan de rebajas del IVA, como las carnes también han disparado su precio. Y el azúcar, por ejemplo, está un 46,3% más caro que hace un año.

MADRID, 13/06/2023.- Vista de una carnicería en el Mercado Maravillas de Madrid. EFE/ Javier Lizon

Los precios se comen la rebaja del IVA

La economista senior de Funcas María Jesús Fernández detalla en conversación con Economía Digital que el recorte del impuesto tuvo «un cierto efecto» en los primeros compases de la medida pero, como los precios han seguido al alza, «se han comido esa rebaja». «No es que no se note, pero al fin y al cabo tampoco representaba tanto en porcentaje del precio», apunta la experta.

Con todo, sí hay una tendencia clara a la baja, indica Fernández: «Hay algunos productos que han tenido pequeñas bajadas de precio, pero no creemos que se vaya a ver el final de las subidas en breve». Pero este traslado de la inflación a los precios de los alimentos está siendo paulatino, por lo que tardará aún en rebajarse de la misma manera en que se ha recortado el índice general.

Maria Jesús Montero y Nadia Calviño en una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros / EFE
Maria Jesús Montero y Nadia Calviño en una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros / EFE

De acuerdo con el último informe de recaudación de Hacienda, del mes de abril, los recortes del gravamen a los alimentos supusieron dejar de ingresar 254 millones de euros en los cuatro primeros meses del mes.

La sequía encarece las cosechas

Desde la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) apuntan que los precios de los alimentos se irán desacelerando conforme pasen los meses, aunque, de acuerdo a declaraciones recogidas por Efe, será clave el factor meteorológico. Hay algunos cultivos afectados por la sequía que ya se han perdido, dice su director general, Mauricio García de Quevedo, por lo que podría llevar al alza los costes de algunos cereales y hortalizas.

Otros costes, señala la economista de Funcas, añaden presiones a la cadena de producción de la industria alimentaria. “Vemos que los inputs como piensos o fertilizantes han subido mucho y están en niveles elevados”, apunta. Los costes laborales, con la subida del SMI o de las cotizaciones sociales, también están trasladándose a los productos finales y tensionando al alza la inflación.

Pero hay una señal positiva: «El último índice de precios industriales –el que mide los costes a salida de fábrica a lo largo de la cadena de producción- arrojó una bajada ligera de los precios en la industria alimentaria que habían subido en vertical durante meses», señala Fernández. De consolidarse, podría indicar que los precios están ya por fin estabilizándose.

Los sindicatos apuntan a los márgenes

Los sindicatos, sin embargo, apuntan a los beneficios de las compañías como principal causa de que los precios de los alimentos estén disparados. «Esto demuestra cómo parte del tejido empresarial sigue manteniendo unos márgenes de beneficio elevados, aprovechando la falta de competencia y el poder de mercado en algunos sectores para fijar precios desorbitados», han denunciado desde UGT al conocer los datos de la inflación.

Ahora, está en manos del Gobierno decidir si prorroga del todo las rebajas del IVA o adopta medidas adicionales. La vicepresidenta insiste: «Adaptamos las medidas a las necesidades del momento». Y en plena precampaña, la austeridad es un argumento en contra.

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