¿Puedo recibir la herencia de un desconocido?
Cuando una persona muere sin testamento ni herederos, el Estado asume la repartición de los bienes
Normalmente, cuando una persona fallece suele legar sus propiedades a sus familiares o amigos. Sin embargo, ¿Qué ocurre si el difunto no tiene herederos ni tampoco designó sus voluntades a través de un testamento? En estos casos, hereda los bienes el Estado.
En concreto, la Administración Pública debe asumir la distribución de las propiedades en tres partes, tal y como indica el portal Finanzas.com. Dos de las partes se entregan a instituciones, tanto públicas como privadas, que pueden dedicarse a actividades de diferente tipo, como la beneficencia o de carácter social.
Conviene destacar que una de las partes se asigna a organizaciones del municipio donde falleció la persona sin herederos y otra de las partes se proporciona a instituciones de la provincia que comprende la localidad.
El tercio de la herencia restante es para las personas que tengan conocimiento del fallecimiento de una persona, sin testamento ni herederos. Estas personas cuentan con la posibilidad de presentar una denuncia ante la Administración Pública y convertirse en herederos del 10% de la parte que corresponde al Estado.
¿Cómo recibir la herencia?
Sin embargo, para ello, es necesario que la persona interesada en hacerse con la herencia conozca las propiedades que estaban en posesión de la persona difunta, así como si tenía familiares hasta el cuarto grado de consanguinidad. Pues, si finalmente existen herederos el Estado no le concederá el porcentaje estipulado de la herencia.
Las personas interesadas habrán de remitir un escrito a la Delegación de Hacienda de la provincia en la que el finado tenía su último domicilio. Asimismo, deberán aportar toda la información vinculada al fallecimiento, como el certificado de defunción, el certificado de últimas voluntades o la relación de propiedades del difunto.
Posteriormente, la Delegación de Hacienda buscará las pruebas de los derechos que pueda tener el Estado a la sucesión. Si, finalmente, confirma que se trata de una herencia sin herederos, el informador recibirá la recompensa, pero es necesario tener en mente que esta puede llegar entre cinco y ocho años después.