Sánchez-Asiaín reconoce las vergüenzas del Popular
Sánchez-Asiaín, nuevo consejero delegado del Banco Popular, reconoce la opacidad y falta de concreción sobre la realidad contable del banco
El último descalabro en bolsa de Banco Popular tiene sus motivos. Así lo reconocen desde la propia entidad, donde cada vez se ponen menos paños calientes sobre la delicada situación contable del banco. “La evolución de la cotización del Popular en los últimos 15 días refleja que estamos generando poca confianza en el mercado”, ha asegurado este jueves en el XXIV Encuentro del Sector Financiero el nuevo consejero delegado del banco, Ignacio Sánchez-Asiaín.
Una desconfianza basada, según el directivo, en la inconcreción sobre las dotaciones para sanear rápidamente sus activos improductivos y en la falta de información sobre “cuántos fondos genera la actividad principal” del banco. “Esta doble realidad del grupo [la inmobiliaria y la bancaria] no ha sido comunicada adecuadamente al mercado», ha continuado Sánchez-Asiaín.
En la que ha sido su primera intervención desde que fue nombrado número dos del grupo el pasado 10 de abril, el directivo ha recordado que el Popular decidió en septiembre separar su negocio tradicional del inmobiliario. No obstante, hasta hace unos días el banco no ha tenido disponible la segregación contable de ambos negocios, en la que se detallan sus ingresos, sus costes o sus provisiones.
“A partir de ahora seremos capaces de responder a esas dos preguntas», y «una vez se de esa información al mercado, será el mercado quien dirá cuál es el equilibrio entre uno y otro negocio y pondrá valor al Popular». A pesar de esta realidad, el nuevo consejero delegado ha defendido que la entidad cuenta con una posición de ventaja competitiva, un valor tangible actual, y un modelo de gestión probado.
Popular: «La doble realidad del grupo [la inmobiliaria y la bancaria] no ha sido comunicada adecuadamente al mercado»
Pese a ello, ha reconocido que el problema del banco es que no ha terminado de digerir el riesgo inmobiliario, y ello pese al esfuerzo hecho. «Quizá no hicimos lo que otros tuvieron la oportunidad de hacer», ha dicho el consejero delegado del Popular en relación a las ayudas públicas que recibieron algunas entidades, que además pudieron segregar sus activos inmobiliarios a la Sareb.