Orange competirá con toda la banca europea
La operadora francesa presenta su nuevo plan estratégico y desplegará su banco progresivamente hasta 2025
Orange ha anunciado este miércoles que extenderá su servicio Black a toda Europa, después de que hace una semana la operadora francesa inaugurara su primera sucursal bancaria en Europa. Según ha informado la compañía, su incursión en el negocio bancario se irá desplegando 2025.
Se trata de una de las claves de la estrategia ‘Compromiso 2025’ que ha presentado este miércoles el presidente, Stéphane Richard. El anuncio ha impactado negativamente en la cotización bursátil de Orange, que ha experimentado una caída superior al 4% en la Bolsa de París. Según los cálculos de la operadora, este plan prevé un crecimiento de su ebitda -beneficio bruto de explotación- de entre un 2% y un 3% anual entre 2021 y 2023.
Además, para ese mismo año, Orange prevé que duplicará su flujo de caja por sus actividades en telecomunicaciones. Esto supondría pasar de los 2.000 millones de euros a los que llegará al cierre de 2019 a una horquilla de entre 3.500 y 4.000 millones de euros dentro de cuatro años. El nuevo plan sustituye a la anterior estrategia, ‘Essentials 2020’, lanzado en 2015 para un periodo de cinco años.
En España, Orange ofrece un 1% de interés sin condiciones añadidas hasta créditos de 20.000 euros. Siguiendo las estimaciones de la compañía gala, en 2023 podría alcanzar casi cinco millones de clientes en todo el territorio europeo que se traducirían en un montante total de 400 millones de euros en ingresos.
Precisamente, la operadora planea la desinversión de unas 5.600 torres radioeléctricas para aumentar la monetización. Este mismo miércoles, Cellnex ha confirmado a través de un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la compra de 1.500 emplazamientos de Orange por 260 millones de euros. Con el resto de sus activos, la compañía espera obtener unos ingresos de alrededor de 700 millones de euros.
Orange ha informado también de los otros retos que se incluyen en su nuevo plan estratégico. Estos serían la mejora de la conectividad; fortalecer su posición en infraestructuras de telecomunicaciones -la operación Cellnex incluye un contrato que convierte a Orange en su cliente por un mínimo de 10 años- y la conversión en un operador digital en África y Oriente Medio, donde estima que podrá implementar la red 4G para el próximo año.
Apuesta por el 5G
Otro de los puntos clave de la nueva estrategia pasa por centrarse en la red 5G. Tras el lanzamiento del servicio en Rumanía, Orange ha confirmado que lo extenderá a la mayoría de países de Europa en los que opera para 2020. Esta red, según la compañía, ofrecerá conexiones diez veces más rápidas y le proporcionará mayor capacidad. No obstante, la operadora ha precisado que será a partir de 2023 cuando tenga la posibilidada de ofrecer una latencia más baja.
Orange llegará a acuerdos de intercambio de red de acceso de radio (RAN) para aprovechar el despliegue del 5G. En este sentido, la compañía planea la creación de sociedades con operadores «FiberCos» para el uso compartido de los servicios de fibra hasta el hogar (FTHH) en España y Polonia para el próximo año.
Asimismo, refuerza su apuesta por su mercado doméstico, Francia, donde abirá el próximo año un centro de innovación en Chatillon para investigar y desarrollar casos de uso de 5G. Precisamente en el país donde Orange tiene su sede creará una filial en 2020, Orange Concesiones, con el objetivo de acabar con su red de cobre a partir de 2023 en un proceso que se extenderá otros siete años.
Orange también ha mostrado su compromiso ante la urgencia climática y ha anunciado que pretende reducir en un 30% las emisiones de dióxido de carbono (CO2) además de utilizar un 50% de energías renovables en el grupo.