La OMC admite que sus previsiones no valen nada tras el brexit y Trump
La Organización Mundial del Comercio vaticina un tímido crecimiento pero sostiene que los factores exteriores marcarán el devenir del sector
Las Organización Mundial del Comercio (OMC) no se atreve a fijar con exactitud cuál será el futuro del comercio. Las razones que emborronan los próximos años del sector están en los factores exteriores. En concreto, el aislacionismo de EEUU, el próximo Ejecutivo en Francia y la salida del Reino Unido de la Unión Europea marcarán el rumbo del comercio mundial
Con toda seguridad el brexit es uno de los fenómenos que más preocupa a la entidad dirigida por Roberto Azevêdo. Y es que la salida del marco comunitario conllevaría un aumento de las políticas comerciales que afectarían tanto a la demanda como a la inversión. Por tanto, el comercio sólo se podrá fortalecer si el crecimiento mundial está garantizado a través de la circulación de bienes y servicios.
Sobre la estrategia aislacionista y proteccionista del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, la OMC prefiere “esperar”. Primero el nominado de la Casa Blanca para encabezar la oficina de Comercio Exterior de EEUU, Robert Lighthizer, debe ser confirmado por el Congreso, afirman desde la OMC.
Previsiones OMC: el crecimiento más pujante del comercio mundial se espera en el primer semestre de 2017
Azevêdo no quiso comentar las próximas elecciones en Francia. No obstante, afirmó que lo verdaderamente importante es «superar los ciclos electorales, sobre todo en las grandes economías, para tener una visión más clara de lo que va a ocurrir». El futuro del comercio mundial también pasa por los indicadores macroeconómicos.
La OMC considera que un repunte imprevisto de la inflación podría obligar a los bancos centrales a endurecer la política monetaria más rápidamente de lo que desearían. Como consecuencia se reduciría el crecimiento económico y, a corto plazo, el comercio.
Los números de la OMC
Las previsiones de la OMC apuntan a que este año el comercio mundial crecerá un 2,4%, pero con una «profunda incertidumbre» sobre él. Por ello, esta estimación se sitúa dentro de una horquilla que va desde el 1,8% al 3,6%, según figura en su informe anual de perspectivas y estadísticas.
Desde la entidad creen que la recuperación se caracterizará por los «exiguos resultados» de 2016, cuando el intercambio de mercancías y servicios solo creció un 1,3%. Una cifra inferior a la que ya apuntó el mismo organismo, que auguró en septiembre un avance del 1,7%.
Previsiones OMC: la organización ya se equivocó y sobreponderó las previsiones del pasado año
La debilidad del crecimiento comercial del pasado año estuvo marcada por la desaceleración en las economías emergentes. Ahora, para los dos próximos años, el comercio solo repuntará si la economía se cumple con los objetivos previstos; una aceleración del PIB del 2,7% en 2017 y del 2,8% para el siguiente. Al mismo tiempo recuerdan que nada de esto será posible si los gobiernos aplican una combinación adecuada de políticas.