Oliu llama a los sindicatos para negociar despidos temporales
El Sabadell planteará en agosto un expediente que afectará a las oficinas de Catalunya y Aragón
Los sindicatos de Banc Sabadell están avisados. Entre el 24 de julio y el 4 de septiembre negociarán con el grupo que preside Josep Oliu decenas de despidos temporales en la red de oficinas de Catalunya y Aragón, según Comfia-CCOO.
La entidad de crédito asegura que pretende ajustar la plantilla en 400 personas de la manera menos traumática posible. Planteará un expediente que reducirá la jornada a los afectados durante 18 meses. Pasado ese tiempo, la medida se levantará.
Los dos territorios han sido testigos de los procesos de concentración de Penedès. Banco Mare Nostrum (BMN) vendió al grupo la red de 462 oficinas propiedad de la caja comarcal.
Oliu quiere que el excedente de personal se corrija de manera natural, es decir con salidas voluntarias durante el próximo año y medio.
La absorción de Penedès
Oliu adquirió el negocio de Penedès para mejorar la cuota de mercado en banca minorista, una de las “palancas”, como diría el consejero delegado, Jaume Guardiola, que el Sabadell precisa estimular para crecer.
Hasta 2.000 profesionales más se han incorporado al grupo el mes pasado, cuando se dio por concluida la operación de absorción. Los sindicatos opinan que, a pesar de las cifras, no procede ningún despido ni rebaja salarial.
Exceso de jornada
Las cifras que dirimen para justificar su posición indican que el 75% de la plantilla de la provincia de Barcelona excede la jornada laboral cada día.
“En Catalunya el banco siempre ha destruido empleo al no reponer los profesionales que se jubilaban con nuevas contrataciones”.
El Sabadell, según la secretaria de la sección sindical de Comfia-CCOO, María García, ha limitado históricamente las prejubilaciones. La red de oficinas catalana “es deficitaria en personal”.
Contactos extra oficiales
Semanas atrás, la dirección del grupo bancario advirtió a CCOO extra oficialmente que sería necesario “sentarse a hablar”, según relata García.
El banco habría mostrado cierta preocupación a los sindicatos por la calidad de los activos financieros y por la llegada de la nueva norma contable, Basilea III, que endurece las condiciones de capital básico.
A pesar de estos contactos preeliminares, Oliu ha pillado por sorpresa a los representantes de los trabajadores. Creen que la absorción de Penedès podría resolverse con escasas prejubilaciones.