La OCDE retrasa la recuperación a 2023 y contraviene las perspectivas del Gobierno

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha proferido un nuevo varapalo a las perspectivas económicas del Gobierno al acometer un notable tijeretazo a sus previsiones de crecimiento sobre España, situándola a ala cola en el vagón europeo este año, y retrasar la recuperación al año 2023.

El recorte de previsiones alcanza los 2,3 puntos de PIB este año, hasta el 4,5%, por el lento despliegue de los fondos europeos, mientras que lo rebaja en 1,1 puntos, hasta el 5,5%, para 2022, y vaticina por primera vez un avance de la economía española para el ejercicio 2023, cuando progresará un 3,8%, según su informe bianual ‘Perspectiva Económica’.

El pronóstico de la OCDE confirma que tras el shock de la pandemia en 2020 que provocó una caída del 10,8%, España no logrará sobreponerse este año ni tan siquiera en 2022 del impacto de la crisis y este año cerrará en el furgón de cola de toda la Unión Europea.

De esta forma, la OCDE contraviene el discurso del Gobierno, ya que la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, sostuvo desde septiembre que la economía recuperaría los niveles de actividad diario y de empleo «antes del final del año en curso», aunque en el Plan Presupuestario remitido a Bruselas el Ejecutivo sostenía que se recuperaría el nivel de PIB y empleo en 2022.

En cualquier caso, las rebaja de previsiones de la OCDE suponen un nuevo varapalo al cuadro macroeconómico del Gobierno, que recoge un crecimiento del 6,5% este año y del 7% en 2022, y se suma a la ola de rebaja de previsiones por organismos como el FMI, la Comisión Europea, Funcas, BBVA Research o próximamente el Banco de España producida desde la revisión del crecimiento del segundo trimestre por el INE y por la crisis energética y de suministros.

De momento el Ministerio de Asuntos Económicos no contempla una revisión del cuadro macroeconómico que sustenta el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022, al prever «coyuntural» la presión de la inflación y augurar que se empezará a corregir el alza de precios y la crisis de suministros desde primavera. Aunque recibió el aval de AIReF, la presidenta del organismo, Cristina Herrero, admitió ayer en el Senado que solo da un 35% de probabilidad a que se cumpla el cuadro macro.

España, al vagón de cola, con una recuperación mundial debilitada

Los nuevos pronósticos de la OCDE suponen que España pasa de encabezar la recuperación a situarse en el vagón de cola en apenas medio año, ya que el repunte del 4,5% este año está por debajo del del conjunto de la zona euro (+5,2%), aunque el 5,5% español de 2022 superará al 4,3% del conjunto de los Diecinueve Estados miembros.

De hecho, solo cinco países (Alemania, Eslovaquia, Finlandia, Países Bajos y Letonia) crecerán menos de lo que lo hará España en el ejercicio actual.

Entre los grandes de la UE, Alemania crecerá un 2,9% este año, sin cambios, y un 4,1% en 2022, medio punto menos, según la OCDE, que mejora en cambio el crecimiento de Francia, al 6,8% y el 4,2%, y también de Italia, al 6,3% y el 4,6%, respectivamente.

La organización con sede en París advierte de que la nueva variante de la Covid-19 constituye una amenaza para la recuperación de la economía mundial, que se ve debilitada por la crisis de suministro y el repunte de contagios en algunos países. También pronostica que la inflacíon global alcanzará un pico a finales de año.

Demanda doméstica más débil y lentitud en los fondos europeos

La economista senior y máxima responsable para España de la OCDE, Müge Adalet McGowan, ha explicado que la demanda doméstica fue «más débil de lo esperado en el segundo y tercer trimestre», en parte reflejando la inflación y el despliegue también «más lento de lo estimado» de los fondos de recuperación europeos.

Otros factores que han incidido en el significativo recorte de previsiones son el lento desembolso de las ayudas directas a las empresas y la falta de despegue del turismo, aunque el organismo apunta que la demanda doméstica será el principal factor de impulso del crecimiento gracias a la mejora de la confianza y de las condiciones del mercado laboral, unido a las condiciones de financiación «favorables».

Riesgos: posible repunte del virus e inflación

Como principales riesgos a la baja para la economía española, la OCDE alerta de la posibilidad de un repunte de la pandemia en un contexto de creciente preocupación por el surgimiento de la variante ómicron proveniente de Sudáfrica que ha provocado ya la cancelación de los vuelos con varios países africanos.

También avisa del riesgo que supone una mayor persistencia de la inflación que pudiese llegar a trasladarse a los precios finales y los salarios, así como de mayores efectos permanentes del desempleo y las quiebras de empresas.

De cualquier forma, la OCDE insta a España a aprovechar los 70.000 millones de euros de fondos europeos a recibir hasta 2023 para impulsar su crecimiento potencial, ya que podría hacer que la economía española sorprendiese al alza, si a ello se sumase también que el turismo logra recuperar sus niveles prepandemia antes de lo pronosticado.

Paro del 14,2% en 2022 y déficit del 5,4% del PIB

En lo referido al desempleo, uno de los principales problemas estructurales de España, la OCDE pronostica una tasa de paro del 15% este año, que se reduciría al 14,2% en 2022 y al 13,6% en 2023.

También vaticina una progresiva corrección de los desequilibrios presupuestarios a pesar de la falta de un plan de ajuste fiscal, en parte gracias a la inflación. Así, tras cerrar España con un déficit del 11% del PIB el año pasado, marcado por la pandemia, reduciría su déficit hasta el 8,1% este año, al 5,4% en 2022 y al 4,2% en 2023.

El Gobierno augura un déficit del 8,4% este año y del 5% el próximo ejercicio, por lo que la OCDE es más optimista este año pero más pesimista de cara a 2022. Ayer la AIReF redujo su previsión de déficit al 7,3% para este año y vio factible cumplir la previsión de 2022, algo en lo que coincidió el Banco de España, ante la mejora de la recaudación y el fin de buena parte de las ayudas de la pandemia.

Igualmente, la ratio de deuda sobre el PIB estimada por la OCDE será superior a lo que calcula el Gobierno (119,5% y 115,1% en 2021 y 2022), dado que alcanzaría el 120,1% al cierre de este año y el 117,1% al concluir 2022. La ratio será del 115,9% en 2023.

Inflación del 2,9% este año y del 3,2% en 2022

En su informe, la OCDE también hace referencia a la escalada de la inflación provocada por el aumento de los precios de la energía calcula que los precios cerrarán este año con una tasa del 2,9%, intensificándose al 3,2% en 2022 por el «efecto arrastre», pero se moderarían al 1,5% en 2023.

En lo referido al mercado laboral, insta de nuevo a España a corregir la dualidad del mercado de trabajo entre los empleos estables y los temporales que presentan una «preocupante» precariedad.

Tras los cambios en materia de pensiones con la reforma de José Luis Escrivá, la OCDE duda de las medidas incluidas en la misma y reclama que se garantice su sostenibilidad financiera a largo plazo, tal y como hizo ayer el gobernador del Banco de España en el Senado.