El Observatorio de Calviño descarta que los súpers hayan disparado beneficios con la inflación
El nuevo Observatorio de Márgenes Empresariales, impulsado por la vicepresidenta Calviño, ha concluido que prácticamente todos los sectores han superado los efectos de la pandemia y recuperado sus beneficios
Los márgenes empresariales del sector de la alimentación siguen por debajo de los niveles de antes de la pandemia, tras presentar un repunte durante los primeros embates del COVID-19, debido a un incremento de los costes de las materias primas y de la energía superior a los ingresos.
Esta es una de las conclusiones del primer informe del Observatorio de Márgenes Empresariales que ha presentado este lunes el Ministerio de Asuntos Económicos. Una entidad impulsada por la vicepresidenta Nadia Calviño con el objetivo de aunar y cruzar datos del Banco de España, el INE, la Agencia Tributaria y el propio Gobierno para conocer la evolución de las empresas.
De acuerdo con los datos, que recogen la evolución desde 2016 de un 75% del tejido nacional en términos de ventas, en términos generales los márgenes empresariales, medidos por la ratio de resultado de explotación bruto entre las ventas, se redujeron sensiblemente en 2020 para la mayoría de las ramas de actividad y se han recuperado desde entonces. Un repunte que se acentuó a principios de año.
En el caso del sector de la alimentación, y sobre todo en cuanto a las grandes cadenas de distribución, muy cuestionadas por el sector morado del Gobierno, el Observatorio constata que los márgenes de la cadena alimentaria tuvieron un comportamiento muy negativo entre los años 2021 y 2022 debido a los efectos del encarecimiento de las materias primas y de la energía. Así, tras repuntar durante la pandemia a un margen de en torno al 11% de su resultado bruto sobre ventas, los efectos de la inflación hicieron que cayeran, desde el tercer trimestre de 2021, hasta situarse por debajo del 8% en el tercer trimestre del año pasado. Por debajo de su media histórica.
Unos márgenes que, fijándonos en el comercio minorista y mayorista de alimentos, se han mantenido relativamente estables aunque también han descendido desde el primer trimestre de 2021.
«El sector alimentario fue de los pocos sectores que, durante la pandemia, tuvieron un fuerte incremento de la demanda y una cierta ampliación de los márgenes. La subida de los costes energéticos, con el impacto de la guerra, y de otras materias primas muy importantes en la producción de alimentos como los fertilizantes han tenido un impacto negativo sobre los márgenes, que ya se están recuperando y disipando», han apuntado fuentes del Observatorio en un encuentro informativo.
Estos datos contrastan con las críticas que vinieron desde la parte morada del Gobierno contra las grandes cadenas de distribución, a quienes se acusó de estar enriqueciéndose con subidas de los precios por encima de las subidas reales de los costes energéticos. En concreto, la ministra de Derechos Sociales y secretaria general de Podemos, Ione Belarra, llegó a llamar al presidente de Mercadona, Juan Roig, «capitalista despiadado» y criticó su «avaricia».
Si bien ahora es la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, quien lleva las riendas del espacio, también desde Sumar -su plataforma de cara a las elecciones generales- han vertido críticas hacia el sector. En concreto, su portavoz, Ernest Urtasun, aseguró que el Observatorio de Márgenes debería fijarse sobre todo en los beneficios del sector de la distribución. Incluso llegó a hablar de especulación en el sector.