Qué es el impuesto sobre la Renta de No Residentes que metió en líos a Shakira

Para evitar el fraude a lo largo del año la Agencia Tributaria intensificará los controles sobre los ciudadanos que no tengan residencia fiscal en España pero que generen rentas en el país.

Es lo que se conoce como el Impuesto sobre la Renta de No Residentes, que es precisamente la raíz del conflicto que tiene Shakira con Hacienda.

Qué es el impuesto sobre la Renta de No Residentes

Según las leyes españolas se considera como residente fiscal a la persona física que permanezca en territorio español más de 183 días al año, que tengan aquí sus principales actividad o intereses económicos o que tengan a su cónyuge (sin estar separado legalmente) y los hijos menores de edad residiendo en el país.

En tanto una persona jurídica tiene esta categoría cuando la sociedad se hubiera constituido bajo las leyes españolas, o en los casos que tenga su domicilio fiscal o su sede de dirección en España.

Por otra parte, al personal de los cuerpos diplomáticos, consulares y a los funcionarios extranjeros también se les considera como residentes fiscales en España.

Hacienda considera como residente fiscal a quien permanezca más de 183 días anuales en territorio español

Cómo se demuestra la no residencia

Los que se consideran como no residentes tiene que entregar el certificado de residencia en un tercer país para no tributar al fisco español, pero deberán hacerlo en ese otro territorio.

Pero para evitar el fraude España tiene firmado convenios con otras naciones para que una persona no pueda ser considerada como residente en dos estados al mismo tiempo.

Diferencia entre ser o no ser residente

La diferencia entre ser considerado residente fiscal en España o en el exterior tiene un punto importante: en el primer caso tienen que tributar por la renta mundial, sea donde sea que se generen los ingresos.

En el segundo caso solo tienen que tributar ante Hacienda por las rentas obtenidas en territorio español.

El tipo impositivo

Este impuesto aplica a los no residentes un tributo del 19% al 24%, que varía según la modalidad de ingresos y del país donde resida.

Para ello Hacienda calcula conceptos como los ingresos por actividades económicas, rentas del capital inmobiliario, si posee o no una segunda residencia o las pensiones.

Ahora bien, en caso de que el contribuyente se considere residente de un país de la Unión Europea o el Espacio Económico Europeo, el tipo impositivo será del 19%.

Pero cabe advertir que hay impuestos que se tienen que pagar en ambos estados, que son los que entran en los convenios de doble imposición.

Qué sucede con los impatriados

Hay una categoría diferente que es la de los impatriados, como se denomina a las personas que han sido convocadas desde el extranjero para trabajar en una empresa radicada en España.

Desde el 1 de enero de este año pueden acceder a este régimen las personas que realicen cualquier actividad económica, no solo los que sean trabajadores por cuenta ajena o los administradores. Además las exigencias fiscales se extienden a los familiares del contribuyente.

En el IRPF hay un régimen especial para los impatriados que les permite seguir tributando durante seis años bajo la figura de no residentes, aunque luego puedan obtener la residencia plena en España.

Esta modificación se hizo al amparo de la nueva Ley de Startups, que entre varios puntos busca atraer al talento exterior en empresas nuevas.