Calviño calla a Iglesias: es «absurdo» derogar la reforma laboral

La vicepresidenta Nadia Calviño ha sido categórica al desautorizar las palabras de Pablo Iglesias en la mañana del jueves, con las que confirmaba que el Gobierno impulsaría la derogación de la refoma laboral y además de forma rápida. Durante su intervención en las jornadas del Círculo de Economía ha calificado como «absurdo» y «contraproducente» abrir ahora este debate y crear inestabilidad e inseguridad jurídica, en un momento en que la economía española se enfrenta a un recesión nunca vista en Democracia. El Gobierno calcula que el PIB se contraerá alrededor de un 9% este año y que el déficit superará el 10%.

Calviño, además, ha agradecido públicamente el apoyo de los empresarios durante toda la crisis y ha insistido en que su papel también será fundamental durante la etapa de reconstrucción de la economía, sobre la que ya se ha comenzado a trabajar en el Congreso. La CEOE había suspendido este jueves las negociaciones con el Ejecutivo, tras conocerse el pacto firmado este miércoles por el PSOE, Podemos y EH Bildu. Calviño ha señalado que cualquier cambio que se pueda aplicar siempre se realizará sobre la base del diálogo.

Este es el mismo discurso que la vicepresidenta económica ha mantenido desde que se conocieran los términos del acuerdo de Gobierno entre el PSOE y Unidas Podemos, en el que se pactaba cambiar las partes más lesivas de esta norma, aunque en numerosas ocasiones los segundos han intentando reintroducir la marcha atrás total a la reforma. En este sentido, el Gobierno ya ha dado algunos pasos, al ilegalizar los despidos por bajas médicas. 

La responsable del área económica de España ha recordado durante su intervención que en este momento 550.000 empresas se han acogido a un ERTE, por lo que tres millones de trabajadores se ven implicados en la crisis. Además, más de un millón de autónomos se habrían acogido a la prestación por cese de actividad. 

Rechazo en pleno desde el sector empresarial

El bochornoso episodio de fractura interna dentro del gobierno español que se ha vivido en las últimas horas, ha tenido una respuesta unánime desde el sector empresarial y también de los sindicatos, que han rechazado las formas.

Después de que se conociera el acuerdo de EH Bildu sobre la prórroga del estado de alarma y el posterior rectificando del PSOE, señalando que los cambios en la normal laboral ni serían inmediatos ni serían totales, Pablo Iglesias defendía la versión inicial esta misma mañana e insistía en dar marcha atrás a la normativa de 2012.

La desautorización pública Nadia Calviño, mucho más rotunda que la de esta mañana de José Luis Ábalos, tensiona más la relación interna en el Gobierno. Los empresarios están teniendo un papel muy activo en el programa de medidas de apoyo del Gobierno, entre ellos en la negociación de los ERTE y la prolongación de la modalidad de fuerza mayor hasta el próximo 30 de junio.

La interlocución se está llevando a cabo con Yolanda Díaz, ministra de Unidas Podemos, lo que abre una incógnita sobre cómo se enfocarán a partir de ahora las negociaciones o si habrá un cambio de liderazgo.

De hecho, justo el pasado miércoles se había producido la primera reunión de la Comisión Tripartita para definir las medidas extraordinarias vinculadas a los ERTE tras el 30 de junio, en el que habían participado el secretario de Estado de Empleo y Economía Social, Joaquín Pérez Rey, la directora general de Trabajo, Verónica Martínez Barbero, y el director general de la Tesorería General de la Seguridad Social, Andrés Harto Martínez han asistido junto con representantes de los sindicatos CCOO y UGT y de las organizaciones empresariales CEOE y CEPYME.

CEOE y Cepyme también están dentro del grupo de trabajo para la Comisión para la Reconstrucción, donde se quiere impulsar el plan de relanzamiento de la economía tras la pandemia.