Montoro baja los impuestos aunque la reforma fiscal se queda en un bluff
El Gobierno aparca, debido al cálculo electoral, los cambios de calado que recomendaron incluso sus asesores; sí aliviará, sobre todo, el bolsillo de los contribuyentes menos favorecidos y los de clase alta
Cristóbal Montoro (PP), enclaustrado desde las elecciones europeas, reaparece este viernes con el objetivo de presentar una reforma fiscal distinta a la que se ha madurado desde principios de año.
La ambición era poner patas arriba el sistema recaudatorio español al completo; sin embargo, el ministro de Hacienda ha elevado al Consejo de Ministros un proyecto menos ambicioso, pensado para frenar la sangría electoral que sufre el Partido Popular.
Escasos retoques de calado
El Ejecutivo apenas hará cambios de calado y propone un escenario que revierte la subida de impuestos de 2011. Dejará aparcadas las modificaciones más profundas para otra ocasión.
Las novedades se centrarán en el IRPF y en el impuesto de sociedades, las únicas vías recaudatorias que sí cambiarán sustancialmente.
Las recomendaciones de Bruselas, de otros organismos internacionales, como el FMI, e incluso de la propia comisión asesora del Gobierno, liderada por el profesor Manuel Lagares, han caído en saco roto.
Más dinero en los bolsillos
El espíritu de todas ellas era que los contribuyentes tuvieran más dinero en el bolsillo pero que Hacienda compensara la menor recaudación con nuevas tasas e impuestos indirectos, en aras de una fiscalidad uniforme, más moderna y próxima a la de las principales economías del mundo.
El nuevo impuesto de la renta favorecerá, con especial contundencia, a partir de enero a los dos extremos sociales: las clases bajas y las altas.
El IRPF supone el 41% de los ingresos del Estado. La mayoría de los pagadores se localizan en la denominada clase media, cuyos integrantes también notarán el alivio fiscal, pero a través de la reducción de siete a cinco tramos de tipo marginal.
Nuevos tipos impositivos
El máximo, que afecta a sueldos desde 175.000 euros, se contraerá del 52% al 48%. A los españoles con menos ingresos se les revertirá con creces la subida de impuestos de hace tres años, según el Gobierno.
El tipo mínimo impositivo se ubicará por debajo del 24%. El Ejecutivo también elevará de forma significativa las exenciones, especialmente para las madres trabajadoras y las familias con mayores o dependientes a su cargo.
Exenciones
La comisión Lagares propuso eliminar la actual reducción de 2.652 euros con carácter general. Hacienda fijará una estructura impositiva nueva para el IRPF y, por tanto, la reducción vigente será modificada.
Los autónomos que pagan impuesto de la renta también verán su factura fiscal aliviada.