Montoro aplica un recorte drástico a la inversión en Catalunya
Retira uno de cada cuatro euros destinados a la obra pública por lo que, por primera vez, la comunidad dispondrá de menos de mil millones
El Gobierno de Mariano Rajoy (PP) ha previsto un recorte generalizado en infraestructuras, el mayor capítulo inversor del Estado, que reduce la partida de obra pública el 7,2%.
Los presupuestos generales del Estado aplican, sin embargo, una drástica reducción en Catalunya, donde el retroceso previsto será del 25,5%. Dicho de otro modo, el ministerio de Cristóbal Montoro (PP) retira uno de cada cuatro euros.
Por primera vez en este siglo, la inversión anual no superará los mil millones. La comunidad recibirá 944, con la mayoría de las instalaciones pendientes de recursos. Es el caso de las cercanías del área de Barcelona.
La decisión la toma el gobierno central en pleno conflicto político por el auge soberanista. También amenaza las fluidas relaciones entre el ministerio de Fomento de Ana Pastor (PP) y la conselleria de Territori de Santi Vila (CIU). Ambos políticos han mostrado sintonía en las últimas semanas.
Disposición adicional tercera
Más allá de las relaciones personales, el Estado ha aprovechado el vencimiento de la disposición adicional tercera del Estatuto catalán. Se fijaba la obligatoriedad de invertir en obra pública hasta 2014 el equivalente al peso de la economía catalana en el conjunto de la española: es decir el 19% del PIB.
Montoro ha confirmado los nuevos datos en la presentación de las cuentas del Estado en las Cortes. El presidente catalán, Artur Mas (CIU), está de viaje oficial en Bruselas, donde se ha entrevistado con el vicepresidente de la Comisión.
El ministro asegura que no dispone de más recursos para crecer en infraestructuras. “Ya me gustaría”, ha dicho a los periodistas. Sí ha anunciado que la deuda del conjunto del Estado crecerá hasta equipararse con la riqueza del país. El próximo año se habrán acumulado prácticamente un billón de euros en pasivo. Se trata de niveles desconocidos.
Las autonomías que se salvan
Si la inversión para Catalunya cae –aunque la mayor damnificada es Asturias (-31,6%)—, la cara de la moneda la protagoniza Andalucía. La comunidad que preside Susana Díaz (PSOE) captará del Estado 1.697 millones por este concepto. La siguen Castilla y León (1.399 millones) y Galicia (1.353 millones).
También se libran del tijeratezo La Rioja, Navarra y Extremadura. Las obras del tren de alta velocidad explican que la inversión se sostenga en esos territorios.