Montero dice ahora que la reforma fiscal supondrá también incentivos y bajada de impuestos
La ministra acusa al PP de defender la bajada de impuestos por "reclamo electoral" en Madrid y de esconder que es para ricos
La constitución del grupo de expertos para la reforma fiscal que prevé acometer ell Gobierno en el futuro y las palabras de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, sobre su “especial interés” en subir Sociedades y armonizar los impuestos a la riqueza (Patrimonio, Sucesiones y Donaciones) despertaron un polvorín de críticas entre la oposición, el empresariado español y llevaron a la vicepresidenta Nadia Calviño y a la propia Montero a aclarar que no se subirán impuestos en este momento ni en el inicio de 2022.
El firme rechazo de PP, Vox y Cs a la eventual subida de impuestos se ha trasladado este miércoles a la sesión de control al Gobierno en el Congreso, con varias preguntas e interpelaciones de estas formaciones a la ministra de Hacienda, después de que ayer negase en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que hubiese hablado de subir impuestos en los Presupuestos de 2022.
“Nunca, en ningún momento trasladé ninguna situación decidida de llevar a los Presupuestos de 2022 algo que no está ni siquiera discutido ni decidido”, enfatizó Montero, quien pidió “dejar trabajar” al comité de 17 expertos constituido para la reforma fiscal integral, cuyas conclusiones deberán presentar al Gobierno antes del 28 de abril del próximo año, con el fin de acercar la presión fiscal de España a la media europea, inferior entre 7 y 8 puntos del PIB (unos 90.000 millones).
Habla ahora de incentivos y bajada de impuestos
De hecho, este miércoles en respuesta al coordinador económico en el Congreso del PP, Mario Garcés, a una interpelación urgente de su grupo sobre la subida de impuestos formulada ha asegurado que cuando se habla de revisión de la fiscalidad “no se trata de subir impuestos”, sino “también de bajarlos y de poner bonificaciones y determinados incentivos a actividades económicas que hay que impulsar”.
De esta forma, Montero no ha realizado una defensa tan férrea de la necesidad de subir impuestos para igualar la recaudación a la media europea y ha hablado incluso de bajadas de impuestos y de que “probablemente” se configuren incentivos para reorientar el modelo productivo, en actividades como la transformación de la cadena de valor en la industria, la incorporación de las energías renovables, la movilización de vivienda vacía y el impulso del I+D+I en las empresas.
Tras las críticas de Garcés (PP), Montero ha afirmado que aspira a tener un debate serio de fiscalidad con el PP y la capacidad de “discriminar” sobre quién tiene que contribuir, al tiempo que ha recordado que el FMI, “nada sospechoso de ser de izquierdas”, plantea que las grandes fortunas aumenten su contribución en la pandemia, al tiempo que la Administración de EEUU aboga por establecer un mínimo en el impuesto de Sociedades a escala internacional.
Igualmente, la ministra ha defendido que la economía ha cambiado y las grandes multinacionales digitales deben contribuir en la misma medida que los negocios tradicionales (pymes, medianas empresas y autónomos) conforme a la normativa vigente.
En este sentido, ha recordado que el planteamiento de Biden a propósito de la armonización fiscal fue discutido también por gobiernos del PP y por su predecedor, el ‘popular’ Cristóbal Montoro, con “mucha lógica y sentido común” para tener “reglas de juego similares” para evitar que algunos países tengan ventajas que provoquen fugas de empresas.
De hecho, ha apuntado que el grupo de expertos constituido por el anterior Ejecutivo del PP ya proponía la armonizacion fiscal dentro de unas determinadas horquillas.
Ve al PP “abducido” por Ayuso y niega contradicción con Gabilondo
“El PP que hemos conocido hasta ahora siempre lo ha compartido y lo ha puesto encima de la mesa”, ha asegurado Montero, quien cree que con motivo de la campaña electoral madrileña el PP “solo representa los intereses de Madrid” en lo que les conviene.
Frente a los supuestos “milagros económicos” de Madrid, Montero ha hablado del “efecto capitalidad” que produce concentración de rentas y empresas, y ha reprochado que los diputados del PP estén “abducidos” por el Ejecutivo regional de Isabel Díaz Ayuso y el PP de Madrid.
De hecho, ha criticado el debate de fiscaliad “tramposo” y el «discurso irresponsable» del PP porque subieron hasta 40 veces los impuestos con el Gobierno de Mariano Rajoy y el ministro Montoro justificó que había que aumentar la recaudación para sostener los servicios públicos, por lo que considera que ahora en la oposición utilizan un ”mero reclamo electoral” al hablar de bajada de impuestos que en realidad “está directamente relacionado con rentas altas o patrimonios”.
Ha aprovechado para censurar la “mentira” del PP respecto a que el Gobierno no respeta la autonomía fiscal ante y ha asegurado que en el Ejecutivo central se asegura la competencia fiscal de las regiones, aclarando que “no puede ejercer de presidente autonómico”, después de la polémica suscitada a raíz de la intención del Gobierno de subir determinados impuestos coincidiendo con el anuncio del candidato del PSOE a la Comunidad de Madrid, Ángel Gabilondo, de no subir impuestos a los madrileños en dos años.
El PP dice que la armonización es subir impuestos
El diputado del PP Mario Garcés ha iniciado su intervención parafraseando a Francisco de Goya al indicar que “el sueño de la razón produce muchos monstruos fiscales”, para subrayar a continuación las “transmutaciones” por las que los nacionalistas vascos y catalanes han pasado de posiciones que negaban el modelo autonómico a “clamar ahora a favor del igualitarismo fiscal” y que el Gobierno se sume a que esa armonización sea al alza.
Garcés ha espetado a Montero que cuando habla de “armonización” fiscal se trata de un “neologismo” de incremento de la presión fiscal, y ha defendido que el ”contrapeso” territorial ha servido para evitar el “sueño distópico” del presidente del Gobierno y del Ejecutivo de igualar en impuestos las regiones.
Como era previsible el debate se ha enrocado en la Comunidad de Madrid, ante las próximas elecciones regionales del 4 de mayo. Al respecto, Garcés ha cuestionado que se hable de Madrid como “aspiradora” y se le acuse de ‘dumping fiscal’ cuando aporta un 78,2% de los impuestos recaudados para financiar servicios de otras comunidades y un 62% de sus tributos en el fondo de garantías de los servicios públicos se dirige igualmente a otros territorios.
Al hilo del argumento de la «capitalidad» esgrimido por Montero para justificar la mayor recaudación de Madrid pese a su política de bajos impuestos, Garcés ha reprochado esas afirmaciones ante lo que considera contradicciones de «juzgado de guardia», pues el presidente socialista de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, lleva un tiempo buscando fijar una capitalidad en la región, así como tras iniciativas en otras regiones.
El ‘popular’ ha sostenido que Bruselas no exige aumentar la presión fiscal cuando demanda combatir los desequilibrios fiscales y le ha instado a la ministra a que empiece a trabajar en un plan de reequilibrio, si bien la titular de Hacienda considera que “no es el momento” y hay que esperar a que se sustente la recuperación, manteniendo hasta entonces la política de estímulos.
«Hay que tener cuajo para hablar de corrupción siendo sobrino de Rato»
Por otra parte, en una interpelación urgente realizada por Vox también sobre impuestos, la ministra ha acusado a la formación de Santiago Abascal de «no defender los derechos constitucionales» y ante las críticas al cupo vasco de formación ha defendido que se trata de un «instrumento constitucional».
También ha rechazo su discurso del «sálvese quien pueda» y que «cada uno se busque la vida» en función de la «suerte» de donde se haya nacido. «Los que tengan mayor capacidad económica tienen que contribuir en mayor medida y los que tienen menor capacidad tendrán que contribuir en menor medida», ha defendido Montero, apelando para mantener los servicios públicos acordados en el «contrato social constitucional».
La sesión de control ha ido en aumento de tensión y en la interpelación del diputado de Vox, José María Figadero, el rifirrafe se ha acalorado, cuando la ministra le ha dicho a Figadero que «hay que tener cuajo» para «hablar de cuestiones que tienen que ver con la corrupción» siendo sobrino del exministro, expresidente de Bankia y exdirector gerente del FMI, Rodrigo Rato, condenado por las ‘tarjetas black’.
Ante las protestas proferidas por la bancada de Vox, Montero ha dicho que tienen la «mandíbula de cristal después de las barbaridades que plantean», y ha censurado el alegato «extraordinariamente grave» de Figadero al «negar la capacidad de lo público y hablar de que la política es inútil» para defender la bajada de impuestos.
En su turno de respuesta, Figaredo reprochado la «innecesaria» mención de Montero a su vínculo familiar y le ha reprobado que «quiere que pague por la herencia de mis padres y también por los aciertos o errores de mis antepasados», y sin embargo «si mi padre obtiene una riqueza no puedo heredarla» ante la postura favorable de Montero a armonizar el impuesto de Sucesiones.
Figaredo ha criticado la «incoherencia» del Gobierno ya que «no tiene sentido que pidan armonziación fiscal con Madrid pero no lo hagan para el concierto vasco». «Quieren estrujar y exprimir a los españoles como si de naranjas se tratase», ha apostillado.
El diputado de Vox también ha negado posturas inconstitucionales de su formación como le ha acusado Montero al atacar el régimen vasco y ha señalado que lo inconstituiconal es «robar dinero de los parados andaluces» en el caso de los ‘ERRE’ que «en el juicio se probó que se gastaron en putas y cocas» mientras la ministra era consejera en Andalucía. También ha citado el ‘caso Isofotón’.
Rifirrafe con PP y Cs por Madrid
En preguntas anteriores del PP y Cs sobre los impuestos, la diputada ‘popular’ Carolina España ha criticado que España haya sido el único país en subir impuestos durante la pandemia y le ha espetado a Montero que “pasará a la historia por querer subir el impuesto de Sucesiones el año en que fallecieron 100.000 españoles por la Covid”.
Montero le ha respondido recordando que el PSOE bajó Sucesiones en acuerdo con Cs en Andalucía y ha criticado la política de bajada de impuestos de Madrid al dirigirse “a los ricos”, al tiempo que ha apuntado que en Galicia, Castilla y León y Andalucía no rebajan los impuestos pese a ser regiones del PP porque el discurso es “mentira” y la recaudación sube en Madrid por el “efecto capitalidad”, algo que no sucede en el resto de regiones.
En otra pregunta del diputado de Ciudadanos y candidato de esta formación a la Comunidad de Madrid, Edmundo Bal, también ha salido a relucir la bajada de Sucesiones en Andalucía, algo que Bal ha dicho que se produjo “gracias a Cs”, al tiempo que ha avisado de que “por cada euro que suba a los españoles en la Comunidad de Madrid se lo bajaremos”.
La titular de Hacienda ha insistido en que “jamás” el Gobierno ha dicho que vaya a subir los impuestos durante la pandemia y le ha recordado a Bal que Ciudadanos “fue la primera formación política que habló de armonización fiscal” y de eliminar las “asimetrías” entre regiones.