Método de ahorro japonés: llega a fin de mes sin problema
'Kakeibo' es un sistema, con más de cien años de historia, diseñado para mejorar las finanzas personales
En el plan de pensiones el trabajador aporta periódicamente un importe. Foto: Pixabay.
La subida de precios generalizada que está experimentando la economía está llevando a más de uno a replantearse establecer un mayor control en sus finanzas. En este contexto, puede resultar útil el método ‘Kakeibo’, un sistema con más de cien años de historia para mejorar las finanzas personales.
El método ‘Kakeibo’
El método de ahorro japonés ‘Kakeibo’ es un sistema para controlar las finanzas del hogar. Los japoneses lo llevan poniendo en práctica desde 1904, cuando la periodista Motoko Hani desarrolló el método y lo publicó en una revista dirigida a mujeres.
Antes de poner en práctica el sistema, es necesario plantearse las siguientes preguntas:
- ¿Cuáles son mis ingresos económicos?
- ¿Cuánto estoy dispuesto a ahorrar?
- ¿Cuánto puedo gastar?
- ¿Cómo puedo mejorar mi situación financiera?
Una vez se tenga la respuesta a estas preguntas, se tendrá consciencia de cuál es la situación financiera de la que se parte y como se puede mejorar a lo largo de la puesta en práctica del método de ahorro.
Contabilizar los ingresos y los gastos
El siguiente paso es tomar consciencia de cuánto ingresamos y cuánto podemos gastar. Para ello, se recomienda utilizar una libreta o una hoja de excel e ir apuntando las distintas cantidades. Pues, poner negro sobre blanco implica dedicar un tiempo a llevar a cabo esa actividad y que seamos realmente conscientes de los ingresos y los gastos.
Clasificar los gastos
Una vez identificados los gastos, es necesario clasificarlos en alguna de las siguientes categorías:
- Gasto esencial: comida, ropa, alquiler, suministros, transporte.
- Gasto no esencial: comida para llevar, viajes.
- Gasto cultural: cine, teatro, museos, libros.
- Gasto imprevisto: médico, taller.
Elaborar un presupuesto
Por último, se debe confeccionar un presupuesto y asignar a cada una de las categorías una cantidad económica específica. De esta manera, podremos priorizar los gastos y recortar el dinero que se destina a aquellos gastos no tan necesarios.
Por tanto, con la puesta en práctica de este sistema de ahorro, no solo se puede hacer un seguimiento de los ingresos y los gastos sino que también es posible ahorrar mayores cantidades cada mes. Asimismo, permite reducir los gastos innecesarios y no salir del presupuesto establecido.
