Mentir en una reseña online te puede costar más de 30.000 euros
Las personas que emprenden una campaña para dañar la reputación de un negocio a través de reseñas falsas se enfrentan a cuantiosas sanciones
A veces, contar con demasiadas opciones puede resultar abrumador. Un claro ejemplo es cuando se está buscando un lugar para comer en una gran ciudad, en la cual se pueden encontrar establecimientos con platos de cualquier punto del globo y para todos los bolsillos.
Ante este escenario, las reseñas escritas por personas que han visitado previamente el lugar y están dispuestas a compartir su experiencia, positiva o negativa, con el resto de usuarios, pueden convertirse en la salvación de los usuarios que se encuentran ante esta disyuntiva.
Sin embargo, se trata de un arma de doble filo, ya que también puede desembocar en un infierno para los propietarios de los negocios. Si bien cuando se lee una reseña se suele confiar en la buena fe del que la ha escrito, conviene tener en cuenta que algunas personas las utilizan para difundir falsedades.
Cómo actuar ante una campaña de reseñas falsas
Los empresarios que se encuentran ante esta situación pueden actuar de distintas formas, si bien es imprescindible contar con evidencias como capturas de pantalla o conversaciones. La vía más efectiva, según el Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe) es la civil.
Contar con evidencias, como capturas de pantalla, es crucial
En el caso de obtener una sentencia favorable, se deberá reestablecer el perjuicio que se haya causado al negocio, pero también desembolsar al propietario una indemnización por los daños causados, tal y como estipula el artículo 9.2 de la Ley Orgánica 1/1982.
Sin embargo, el organismo apunta que la opción más sencilla es la de utilizar los canales de denunciar que ofrecen las propias plataformas. Sin ir más lejos, Google cuenta con un apartado para tratar las reseñas que vulneran las condiciones establecidas y que atentan contra el derecho al honor de las compañías.
Para evitar una campaña de reseñas falsas, se recomienda revisar de forma periódica las reseñas y los comentarios publicados en las plataformas para poder identificarlos.
Google cuenta con un canal de denuncias de reseñas falsas
Asimismo, se aconseja responder de forma educada a las reseñas negativas, tratar con el máximo respeto al usuario y expresar opiniones personales o de carácter político o religioso.
De la misma manera, sugiere establecer políticas de seguridad acordes en los perfiles de redes sociales, tanto en materia de privacidad, como de seguridad de las contraseñas y prestar especial atención al trato que se hace de los nombres, logotipos y marcas corporativas, ya que se trata de elementos registrados.
Multas de más de 30.000 euros
En cualquier caso, mentir en una reseña no sale gratis. Muestra de ello es la sentencia del Juzgado de Primera Instancia 7 de Santander, con la que se condenó a un cliente de una clínica veterinaria a desembolsar una indemnización con 34.895,83 euros a tres veterinarios de la clínica por vulneración del derecho al honor.
Además, autorizó a Google a retirar las reseñas falsas y con un marcado tono amenazante, que la persona en cuestión había publicado en internet. Conviene destacar que, en este caso, la persona denunciada había alertado previamente al establecimiento que “iba a machacarlo en las redes sociales”.