Los pensionistas con el IRPF más alto que tendrán que pagar 1.000 euros más
A causa de la revalorización de las pensiones el gravamen también será más elevado
Las personas que perciben una pensión del sistema público también se encuentran en la obligación de desembolsar el importe correspondiente al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), tal y como han hecho a lo largo de toda la vida laboral. Teniendo en cuenta que este año se han revalorizado las pensiones para ajustar el importe de estas prestaciones a la coyuntura actual, el IRPF a abonar también será más elevado.
Tal y como reflejan los datos del Colegio de Economistas, quienes reciban la pensión máxima tendrán que pagar un total de 8.745 euros de IRPF, lo que supone 1.360 euros más respecto a lo pagado en 2022. Sin embargo, los jubilados que se encuentren en el escalón que le sigue a la pensión máxima tendrán que pagar 1.000 euros más de IRPF por el aumento de la cuantía. Por tanto, este año tendrán que tributar a Hacienda unos 7.000 euros por sus prestaciones.
En el caso de las pensiones medias, que rondan los 18.900 euros mensuales, sus beneficiarios tendrán que abonar 1.572 euros de IRPF, de los que 172 euros corresponden a la proporción del aumento otorgado por la Seguridad Social.
Cambiar la retención de IRPF
El porcentaje de retención de IRPF en la pensión depende de la cuantía de la prestación y de la situación personal del jubilado. De la misma manera que los trabajadores, los pensionistas pueden solicitar cambios en las retenciones de IRPF de la prestación. No obstante, solo podrán incrementar el porcentaje o, una vez solicitado ese aumento, volver a las retenciones iniciales.
El cambio de la retención del IRPF de la pensión se realiza a través de la Seguridad Social, donde se debe descargar y rellenar el formulario con toda la documentación requerida. Para enviarlo hay que pinchar en «Enviar solicitud» , donde se deberá cumplimentar más información personal, así como presentar dos fotografías del DNI, por delante y por atrás, para que el organismo pueda verificar la identidad de la persona interesada en solicitar el cambio.