Llega la hipoteca Mari Carmen: qué es y para qué sirve
La contratación del producto no comporta el desembolso de ninguna comisión de apertura
Hipoteca. Pixabay,
Abanca ofrece la hipoteca Mari Carmen, un préstamo que permite solicitar hasta el 80% el importe que sea menor, o bien, de la tasación de la vivienda o el precio de la compraventa. La contratación del producto no comporta el desembolso de ninguna comisión de apertura, ni tampoco de gastos de notaría, registro o gestoría. Además, permite devolver la hipoteca a la entidad financiera en un plazo máximo de 30 años.
Condiciones
La hipoteca es con un tipo de interés variable. En concreto, el primer año cuenta con el TIN al 2,51 %, sin embargo para el resto de años de devolución del préstamo se fija el Euríbor a un año +1,50%. Por su parte, el TAE Variable es al 4,15% durante 25 años.
Bonificaciones
No obstante, conviene tener en cuenta que es posible obtener una reducción del 0,70% en la tarifa, con el TIN al 1,81% el primer año y el Euríbor a un año + 0,80% el resto períodos, mientras que el TAE Variable estaría al 3,82% a 25 años.
Para acogerse a la bonificación es necesario domiciliar los seguros sociales, o bien, ingresar todos los meses una aportación única, similar y estable, como la pensión o la nómina, con un importe mínimo de 600 euros al mes. En estos casos, la bonificación es del -0,25%.
Asimismo, es necesario contratar un seguro del hogar, todo riesgo construcción, comercio/pyme, en función de la naturaleza del bien, tal y como señala la entidad financiera en su página web. No obstante, este debe estar comercializado a través de Abanca y estar asociado a la hipoteca.
También debe tener una cobertura al menos igual al mayor de los valores de tasación a efectos del seguro. Con la contratación del seguro, que cuenta con una prima anual de 314 euros con unos capitales de 150.000 euros de continente y 12.000 euros de contenido, el cliente puede obtener una bonificación del -0,20% en su hipoteca.
Otra opción para acceder a la bonificación del -0,25% es la contratación de uno o varios seguros de vida comercializados a través de Abanca. Las aseguranzas han de estar a nombre de los titulares de la hipoteca y han de garantizar la totalidad del saldo pendiente de la hipoteca en la fecha de revisión, según especifica la entidad financiera.