Las ventas de ropa y textil se hunden un 53% en enero por la pandemia y el temporal

El mes de enero se ha convertido en un cóctel perfecto para tumbar el negocio de las empresas de ropa y del sector textil en general. El impacto de la pandemia y las consecuencias de la borrasca Filomena han provocado que las ventas de los establecimientos de moda se reduzcan un 53,2%. Un nuevo golpe drástico en la época más importante del año por la campaña de las rebajas.

El avance de la tercera oleada de coronavirus ya provocó que el año arrancara con una amplio mapa de restricciones sanitarias que afectaba a los comercios no esenciales en buena parte de las comunidades autónomas. Las limitaciones de aforo y horario ya anticipaban un resultado tibio de la actividad en el primer mes del 2021, que finalmente ha empeorado.

El temporal de nieve que provocó la borrasca Filomena ha terminado con las pocas expectativas que contaban los negocios de moda. Las dificultades para acceder a los establecimientos desencadenaron los cierres temporales de los locales en el mejor fin de semana de ventas de todo el año que concentra cerca del 25% de la facturación anual.

“No ha podido empezar peor el año«, ha lamentado la Asociación Empresarial del Comercio Textil, Complementos y Piel (Acotex), según ha publicado Europa Press.

El sector textil modera la caída de enero con unas fuertes rebajas

Para compensar el hándicap de la pandemia y del temporal de nevadas, los negocios han tenido que poner en marcha una campaña de rebajas con unas promociones mucho más agresivas que en años anteriores, lo que ha reducido también el poco margen de beneficio en los negocios más perjudicados.

“No éramos muy optimistas de cara al mes de enero y en concreto a la campaña de rebajas”, ha admitido la patronal del sector de la moda.

En las dos primeras semanas del año, cuando se concentran la mayor parte de las compras impulsivas de las rebajas de enero, el sector perdió cerca de 2.000 millones de euros en ventas por las dificultades meteorológicas y sanitarias para atraer a los clientes. La mayor parte de estas transacciones se realizan por el efecto llamada de los descuentos y la visibilidad de los escaparates, un efecto suprimido por la falta de transeúntes.

En un año convencional con buenas condiciones climáticas, las ventas de las dos primeras semanas pueden llegar a representar unos ingresos de hasta 3.000 millones de euros para los establecimientos de moda repartidos por el país.

El sector textil reclama más incentivos fiscales al Gobierno

Tras el golpe sufrido en el primer tramo del año, la patronal del sector textil ha vuelto a reclamar al Gobierno de Pedro Sánchez que ponga en marcha un plan de reactivación de la actividad, que les ayude a compensar las pérdidas que han arrastrado en 2020 por la pandemia de coronavirus.

Exigen la exoneración de las cuotas de la Seguridad Social, la reducción del Impuesto de Valor Añadido (IVA) que grava las prendas de ropa para incentivar el consumo o una moratoria en el pago de los préstamos ICO, a los que han recurrido los empresarios para mantener la liquidez en sus negocios.

También quieren que el Ejecutivo ofrezca una solución a largo plazo para ocuparse de las dificultades que tienen las empresas para hacer frente al pago de los alquileres comerciales, mientras continúen los niveles de ventas en niveles bajos.

“No nos valen moratorias en los impuestos, tasas, tributos o en las cuotas de la Seguridad Social”, ha expresado la patronal.

Acotex anticipa que con este escenario va a ser imposible mantener el mismo nivel de empleo en las empresas que antes del inicio de la pandemia de coronavirus, por lo que precisan también facilidades para despedir a los trabajadores, sin tener que sufrir penalizaciones.