Las casas de apuestas aprovechan los retrasos de la ‘ley Garzón’ para disparar el gasto en publicidad
Las partidas de marketing y publicidad de las empresas del juego online escalan un 200% respecto al estado de alarma y un 45% frente a 2019
Las casas de apuestas encuentran una vía de escape al órdago del Gobierno. Con las nuevas restricciones aprobadas en noviembre, el juego online verá como sus posibilidades de anunciarse se encaminan a quedar equiparadas a las del tabaco. Pero mientras las limitaciones no entren en vigor, las compañías están dispuestas a tirar la casa por la ventana: el gasto en publicidad y marketing se ha disparado por encima del 80% respecto a 2019, según los últimos datos disponibles.
El Ministerio de Consumo puso en el punto de mira al sector desde su llegada para “erradicar la adicción al juego”. Con el estado de alarma, el ministro Alberto Garzón vio su oportunidad para prohibir casi por completo la promoción de la industria. La medida hizo que el gasto publicitario de las empresas se desplomase hasta un 65% durante el segundo trimestre del año.
Sin embargo, el fin del estado de alarma volvió a incrementar la promoción comercial de las firmas. Precisamente en un momento en el que se disputaba la recta final de LaLiga Santander y se celebró la fase final de la Champions League, dos de los eventos que más dinero mueven. Las casas de apuestas lo aprovecharon y la inversión en publicidad se disparó un 275% respecto al trimestre previo.
Frente al verano de 2019, la subida también fue evidente, según los datos de la Dirección General de Ordenación del Juego. Es cierto que los meses de julio, agosto y septiembre suelen tener poca actividad, pero los presupuestos para bonos, patrocinios, publicidad y afiliados escalaron un 82% respecto a la temporada estival del año anterior.
Para frenar el apetito comercial del sector, el Gobierno aprobó el pasado mes de noviembre un Real Decreto que restringe su publicidad en televisiones, radios, prensa escrita, redes sociales y plataformas como Youtube. Sin embargo, la nueva ley todavía no sirvió para rebajar el ritmo. De hecho, desde el propio Ministerio asumen que las cifras del cuarto trimestre serán similares a las del periodo anterior.
El texto aprobado por el Consejo de Ministros aplazó su entrada en vigor de la totalidad de puntos hasta el mes de agosto por recomendación del Consejo de Estado. Al existir contratos con televisiones y entidades deportivas se prefirió prorrogar la aplicación del 100% de las medidas. Especialmente dolorosa será la medida para los equipos de fútbol, en un momento delicado por el impacto del coronavirus en sus cuentas. Según la patronal, los ingresos por patrocinio del sector les suponen 90 millones de euros al año.
Las medidas del Gobierno son una «persecución» para el sector
Cuando la ley Garzón funcione a pleno rendimiento, las casas de apuestas y el resto del juego online solo podrán publicitarse de una a cinco de la madrugada y sin utilizar el reclamo de famosos como hacen ahora. Tampoco podrán patrocinar a clubes deportivos colocando su logo en las equipaciones, anunciarse en las calles o poner su nombre a un centro o reciento deportivo.
A la espera de su aplicación, la patronal no se quedó de brazos cruzados. Desde el Consejo Empresarial del Juego lamentan que la norma no se sustenta en datos y que España está entre los países de Europa mejor situados en la lucha contra la ludopatía y el juego infantil. «Se trata de una persecución en toda regla», denuncia el director general del organismo, Alejandro Landaluce.
Garzón «ni siquiera» ha defendido la ley ante la prensa, denuncia Jdigital
Desde la Asociación Española de Juego Digital (Jdigital) ya criticaban hace semanas que Garzón no haya “ni siquiera” defendido la norma en rueda de prensa. Además, alertaban de que las nuevas restricciones solamente provocarán un incremento del juego ilegal.
Por ello, la organización recurrió el Real Decreto ante el Tribunal Supremo. El alto tribunal lo admitió a trámite este mismo mes de enero, solamente unos días después de hacer lo propio con el que presentó la Asociación de Medios de Información (AMI), que engloba a los principales grupos de comunicación españolas