Fusión Caixabank-Bankia: los 8.378M en hipotecas IRPH son ahora la mayor incógnita legal
La suspensión por coronavirus de la vista del IRPH en el Supremo deja en el aire que ambos conozcan la nueva jurisprudencia antes de convocar sus juntas
La no culpabilidad de la cúpula de Bankia que impulsó la salida a bolsa en 2011 cierra uno de los dos grandes capítulos legales pendientes de la nueva Caixabank que surgirá tras la fusión por absorción del banco que ahora preside José Ignacio Goirigolzarri.
Liberada de posibles responsabilidades civiles a los inversores institucionales tras el fallo -Bankia lanzó hace años un plan para recomprar acciones a los particulares que acudieron al debut en bolsa-, al nuevo gigante en España de la banca le quedaría una única gran incógnita legal por resolver como es el futuro de las hipotecas referenciadas al IRPH.
La integración de ambos dará vida a la entidad financiera con más exposición a este indicador -ya lo era Caixabank-. A 30 de junio, la carga conjunta en créditos ascendía a 8.178 millones; repartidos entre una cartera de 5.678 millones del banco que lidera Gonzalo Gortázar y otra de 2.500 millones de Bankia.
No obstante en su informe financiero del primer semestre el segundo puntualiza que, de dicho importe, 1.500 millones no se corresponden con acuerdos directos entre el banco y sus clientes; limitando de alguna manera su riesgo directo a 1.200 millones.
«Hay aproximadamente 1.500 millones de euros al corriente de pago (1.600 millones de euros a 31 de diciembre de 2019), que corresponden a carteras de préstamos relacionados con medidas de financiación de actuaciones en materia de vivienda y suelo, en los que el índice de referencia que figura en la cláusula del contrato, IRPH, no fue pactado entre el consumidor y la entidad, sino que viene impuesto en virtud de una disposición imperativa vigente aplicable a los mismos conforme al marco jurídico y fáctico en el momento de la celebración del contrato, como por ejemplo los planes de Vivienda de Protección Oficial«, señalan.
Asimismo, relevan que la cierre de primer semestre existían 299 demandas contra la sociedad por este tipo de créditos.
Caixabank, por su parte, no especifica el número de procesos legales, pero sí revela que la cartera sana de IRPH a 30 de junio era de 5.678 millones y que no había realizado ninguna provisión específica ante los posibles riesgos legales.
El coronavirus retrasa la vista del Tribunal Supremo
Estaba previsto que este jueves los magistrados del Supremo se reunieran para emitir voto y fallo sobre en una serie de conflictos entre clientes y bancos sobre el IRPH. Esta vista llegaba después de que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) validara que los tribunales españoles pudieran valorar caso por caso si la venta de la hipoteca IRPH se había procedido de forma transparente o no.
El coronavirus, sin embargo, también ha pasado factura a esta cita y la vista se ha tenido que suspender al encontrarse uno de sus miembros en cuarentena. Sin que se conozca la fecha para una nueva reunión, si se dilata, podría provocar que las juntas de accionistas para aprobar la fusión se convoquen sin conocer el último capítulo de este riesgo legal; que es relevante para el grupo, aunque el riesgo se ha moderado desde que el TJUE no cuestionara la transparencia del IRPH.
En la presentación de la fusión, Gonzalo Gortázar y José Ignacio Goirigolzarri avanzaron que los consejos primero tendrían que validar las cuentas de los nueve primeros meses del año y que, entonces, se convocarían las juntas de accionistas para aprobar o rechazar la fusión. En principio, con este calendario, se celebrarían en noviembre.
Lo que dictamine el Supremo es importante porque crea jurisprudencia y dará una guía de uso a los tribunales españoles para estos casos. Sin nuevos sobresaltos -algunos jueces ya han avisado que podrían volver a pedir un posicionamiento a Europa- uno de los temas más polémicos es si se aplica la sustitución del índice o desde cuándo. Uno de los posibles índices sustiturios es el euríbor.