La vivienda estabiliza precios pero sigue sin tirar del carro
La demanda embalsada en Madrid y Barcelona está saliendo a comprar con descuentos del 50% sobre los máximos de hace ocho añosÂ
«La prudencia recomienda no tirar cohetes y no habrá despegue inmediato ni recuperación de precios a corto y medio plazo», asegura Juan Fernández-Aceytuno, director general de Sociedad de Tasación, al analizar la situación del mercado inmobiliario en España y las tendencias que se vislumbran en los próximos meses.
Un análisis que, a nivel general, lleva a pensar que los precios de la vivienda en España han tocado suelo en 2014, pero que, si se entra en el detalle, el panorama presenta todavía algunas dudas, con una situación dual.
Demanda embalsada
Dentro de la recuperación, zonas de las grandes ciudades, como Madrid y Barcelona, están viendo cómo la demanda embalsada durante los últimos años está saliendo a comprar aprovechando esos descuentos medios del 50% aplicados desde los máximos de hace ocho años.
Estabilización de precios en el caso de la vivienda usada, pero todavía con un ajuste no acabado en lo que a casas nuevas se refiere. «Los precios, en este caso, seguirán bajando mientras la demanda y las ventas no se reactiven», apunta Fernández-Aceytuno.
Generación de hipotecas
Lo que no se percibe desde la Sociedad de Tasación es que vaya a haber subidas de precio generalizadas con la escasa generación de hipotecas que, a pesar de algunos datos optimistas últimamente lanzados, sigue siendo muy escasas con esos 48.000 millones de euros de nuevas hipotecas, menos que las que se daban en 1998.
Para ver de dónde venimos y dónde estamos en España por lo que al mercado hipotecario se refiere, en 2007, el año del estallido de la burbuja inmobiliaria, se generaron casi 260.000 millones de euros de nuevas hipotecas, con más de un billón de euros por amortizar y 121.000 millones amortizados.
Titulización hipotecaria
En 2011, en plena crisis, la generación de préstamos para compra de vivienda bajaba a 82.000 millones, manteniéndose todavía ese billón por amortizar y se devolvieron 152.000 millones. Y en 2014, a pesar de la supuesta recuperación, solo se firmaron hipotecas nuevas por 48.000 millones.
Lo que sí se ha reducido, en aproximadamente un 30%, es el nivel de lo que se debe, hasta los 723.000 millones de euros. Una cartera que en un 60%, unos 425.000 millones, está titulizada en cédulas y fondos de titulización.
Un mercado que se cerró en 2007 y que todavía no se ha abierto, pero que ha seguido manteniendo su solvencia. «Ningún título español ha dejado de pagar los intereses de esa titulización en los últimos ocho años», asegura el director de Sociedad de Tasación.