La vieja guardia del Cercle pide a Faus que trate de unir las candidaturas de Guardiola y Cañadas, pero desdramatiza las elecciones

El encuentro entre los expresidentes del Cercle d’Economia y su líder actual, Javier Faus, terminó con dos grandes consensos: la búsqueda de una candidatura única para las próximas elecciones de la entidad y, de no ser posible, la desdramatización de los primeros comicios de su historia. Jaume Guardiola y Rosa Cañadas son los dos dirigentes que hablan abiertamente de presentarse al cargo. Y aunque distantes, la vieja guardia de la entidad cree que todavía los puede unir.

Faus había convocado este lunes al mediodía a los expresidentes del Cercle a una comida que se celebró en la misma sede de la entidad para abordar su sucesión, prevista para el próximo verano, cuando termina su mandato. A su llamado acudieron Josep Piqué, Salvador Alemany, Juan José Brugera, Pedro Fontana, Carles Tusquets, Joan Mas Cantí, Carlos Cuatrecasas, Joan Molins y Vicenç Oller. Solamente Antón Costas y Enric Corominas se ausentaron. Antoni Brufau se conectó por vía telemática desde Madrid.

La reunión sirvió para que el actual presidente propusiera a Jaume Guardiola, miembro de la junta actual y exconsejero delegado de Banc Sabadell, como su relevo. Sin embargo, por primera vez en la historia del Cercle existe una candidatura alternativa a la oficial, la de Rosa Cañadas, presidenta de Trea Capital.

Lo que en otras ocasiones hubiese sido un encuentro de trámite en casa de Artur Suqué –sede histórica de este tipo de comidas– esta vez fue una sesión que, a pesar de ser cordial, tuvo sus momentos de tensión y de la que se consiguió sacar dos conclusiones por unanimidad.

La primera: los expresidentes pidieron a Faus que trabaje para conseguir integrar ambas candidaturas; algo que se antoja muy complicado, pero que se abordará a partir del próximo enero. La segunda: «desdramatizar» la convocatoria de unas elecciones entre dos personas perfectamente preparadas para dirigir la organización. La única opción viable ahora mismo para evitarlas sería que Cañadas se integrase en el equipo de Guardiola, pero la dirigente no parece estar por la labor de hacerlo y ya ha rechazado ser su vicepresidenta.

Los comicios son algo que se quiere evitar dentro del Cercle. Al ser los mandatos de solo tres años, se quiere esquivar las turbulencias que podría generar una oposición ya organizada desde el día uno de tomar el cargo. Sin embargo, ahora se intuyen inevitables a pesar de que las fuentes consultadas encuentran «muchas similitudes» entre ambas propuestas.

De celebrarse las votaciones, el presidente actual se comprometió a no tomar partido por ninguno de los dos candidatos –a pesar de haber propuesto a Guardiola– y ser el organizador de las primeras elecciones de la historia de la entidad.

Tensión entre Fontana y Tusquets

La comida se alargó durante más de dos horas y todos los presentes tuvieron su oportunidad para presentar sus argumentos. Aunque cordial, tuvo un momento de tensión entre Carles Tusquets y Pedro Fontana y Joan Mas Cantí. El segundo y el tercero acusaron al primero de conflicto de intereses al ser tanto expresidente como el marido de Rosa Cañadas.

Tusquets no obstante respondió que Fontana tampoco guardaba la neutralidad exigida al ser el gran auspiciador de Guardiola, con el que coincidió durante años en el consejo de Banc Sabadell. La sangre no llegó al río, aunque el financiero hubiese querido salir de la reunión con un mayor apoyo para la candidatura alternativa.

Tampoco lo obtuvo Guardiola, que sí está percibido eso sí como el hombre institucional. Los expresidentes declinaron posicionarse a su favor de manera oficial ante la percepción de que existe otro proyecto.