La verdadera historia de la salida de Bhavnani de Renta Corporación
El inversor de origen indio se retira por la puerta falsa de la inmobiliaria barcelonesa empujado por Hernández Cabanyes
La promesa incumplida de adquirir hasta el 5% de Renta Corporación le ha constado al singular inversor indio afincado en España Ram Bhavnani el puesto de consejero de la inmobiliaria Renta Corporación. Bhavnani se había convertido en un compañero de viaje molesto para el presidente y primer accionista Luis Hernández Cabanyes, que durante la dura crisis de la inmobiliaria ha defendido en solitario la cotización, y que ha decidido prescindir de su socio.
El empresario conocido como “el tendero millonario” anunció el pasado 15 de noviembre su salida del consejo de la inmobiliaria por «circunstancias estrictamente personales y debidamente motivadas». Sin embargo, hace ya mucho tiempo que sus relaciones con el presidente del grupo no eran las mejores.
Las razones se remontan a febrero de 2008. Entonces, en pleno desplome de la cotización –el valor acumulaba una caída de casi el 70% en los 12 últimos meses–, desde el entorno de Bhavnani y de la propia Renta Corporación se filtró que el hasta hacía pocos meses dueño del 14,99% de Bankinter aumentaría a corto plazo su participación en la inmobiliaria desde el 1,5% que ya controlaba hasta el 5%.
Entró junto a Blas Herrero
Ese mismo año, en julio, Hernández Cabanyes daba entrada a Bhavnani en el consejo, al que también se incorporó Blas Herrero, propietario de Kiss FM, y que acababa de declarar una participación del 3,5% en Renta.
Para la inmobiliaria, dar entrada en el consejo a unos apellidos tan ilustres equivalía a fortalecer el grupo frente a unos mercados financieros que estaban poniendo en entredicho su modelo de negocio. Renta, dedicada a la rehabilitación de edificios singulares en las grandes capitales para su venta posterior y cuyo secreto está en la rápida rotación de estos activos, acababa de realizar un profit warning rebajando las previsiones de resultados de 2007.
Pero la promesa de Bhavnani de alcanzar el 5% ha estado más de dos años durmiendo el sueño de los justos. Hoy, el inversor indio tiene apenas el 1,551% del capital y no ha apoyado en absoluto la cotización de una compañía que salió a bolsa en abril de 2006 a 29 euros por acción y que hoy vale apenas 1,2 euros.
Afincado en Santa Cruz de Tenerife, Bhavnani regenta, junto a su suegra y un cuñado, el bazar Casa Kishoo. Además de ser uno de los grandes propietarios de Bankinter, el especulador llegó a tener también una alta participación en el Banco Zaragozano, con la que obtuvo una enorme plusvalía.
Hernández Cabanyes aguanta el valor
La inacción de Bhavnani, el hombre en el que Cabanyes había visto un catalizador para recuperar la confianza de los inversores, contrasta con la encendida defensa que el presidente ha hecho del valor en bolsa. Luis Hernández ha comprado acciones en pleno desplome de la cotización.
Empezó el 2008 con el 36,6% del capital del grupo y hoy controla el 39,385%. El presidente ha creído que ya no tenía sentido que Bhavani siguiera en el consejo, no tanto por la modestia de su participación como por su escasa implicación en el proyecto.
Atrapado en el valor
Ésa era un razón de peso, sobre todo si se tiene en cuenta el extraordinario esfuerzo que en términos de coste ha realizado la compañía para salir adelante. El grupo, que a mediados del año pasado cerró la refinanciación de su deuda, ha reducido las pérdidas el 38,8% hasta septiembre, hasta los 1,8 millones de euros.
Ahora, la gran incógnita es el futuro de la participación de Bhavani, en la que el empresario de origen indio acumula una importante minusvalía. El inversor construyó su participación a un precio superior a los 30 euros por acción. Para recuperar su inversión, necesita que la cotización de Renta se multiplique por casi 30 veces.
Antes de salir Bhavnani, Carlos Solchaga y Pedro Nueno también habían abandonado el consejo de la compañía presidida por Hernández Cabanyes.