La reconversión del RACC se ha cobrado ya más de 50 puestos de trabajo
La crisis que afecta al Reial Automòbil Club de Catalunya se ha cobrado en los últimos dos meses más de 50 puestos de trabajo de las diferentes empresas que forman el entramado que opera bajo el paraguas RACC, según fuentes laborales.
La reducción de personal se produce, según las fuentes consultadas, por diversos medios. Uno son las prejubilaciones. Otro, los acuerdos bajo la fórmula de despidos improcedentes, que dan derecho a cobrar indemnización y a acogerse a las prestaciones de paro y el tercer mecanismo son las externalizaciones de servicios.
Uno de los movimientos que más ha extrañado a la plantilla ha sido la externalización de parte del servicio de la llamada central de alertas, es decir, del servicio al que los socios llaman cuando tienen un problema en carretera. Este tipo de actividad siempre se ha considerado muy important por la dirección del grupo porque marca la diferencia entre lo que ofrece una entidad sin ánimo de lucro y el que puedan dar otras empresas. En la nueva filosofía se ha roto este tabú y parte de las llamadas las atiende ahora una empresa externa, Konecta, aunque por ahora esto no ha supuesto merma en la plantilla de Acaservi, que es la empresa del grupo que presta esta atención.
Por otra parte, en 2008, el RACC adjudicó a IBM la gestión de su infraestructura tecnológica por un período de cinco años y por un importe de 13 millones de euros, informaron en su día las dos sociedades. El contrato supuso la incorporación de 19 empleados del RACC a la plantilla de IBM.
El RACC, un club deportivo que es propietario de un conjunto de empresas e incluso de una fundación, cuida con extremo cuidado que, en ninguna de las empresas en las que se está reduciendo personal, el porcentaje de las bajas pase del 20% lo que legalmente obligaría a realizar un Expediente de Regulación de Empleo y a presentar datos de la marcha de las empresas afectadas.
La reconversión silenciosa que afecta al RACC ha sorprendido a una plantilla que en conjunto supera las 2.000 personas, acostumbrada a unas relaciones laborales que en sus inicios fueron de tipo paternalista y que en los últimos años se han homologado con empresas en las que prima el interés por ganar dinero.
La política de recorte de personal tiene, aunque la empresa no lo reconozca, como objetivo reducir los gastos para compensar los malos resultados de algunos de los principales negocios del grupo. Según los últimos datos públicos, el RACC ingresó el año 2008 475 millones de euros . Los servicios de asistencia mecánica en aquel año sumaron 986.452 , lo que supone una media de 2.702 servicios diarios y representa un incremento del 7% frente al ejercicio precedente, informó en su momento la entidad. La entidad tiene 1,1 millones de asociados.
Los ingresos del RACC tenían como principal fuente hasta el inicio de la crisis la correduría de seguros. La entidad era la que gestionaba el mayor número de pólizas de España. En segundo lugar, estaba el apartado de viajes y turismo. Según manifestó la empresa en mayo de 2009 el primer apartado suponía el 50% de la facturación consolidada y el segundo el 25%. La tercera fuente de ingresos son las cuotas de los socios a los que presta ,entre otros, servicios de asistencia automovilística, atención médica, asistencia jurídica y de recursos de multas, formación de conductores o asistencia informática. En todos estos apartados la caída de la recaudación ha sido importante, según ha reconocido en documento interno la empresa.
Entre otros negocios, el club tiene también el 50% de la empresa de helicópteros TAF y el 18% del consorcio propietario del Circuït de Catalunya en Montmeló (Vallès Oriental).
La empresa, que no ha querido manifestarse a pesar de ser consultada, ha visto como diversas iniciativas puestas en marcha no tenían el resultado apetecido. Entre estas figura el operador de telefonía móvil que ha creado en colaboración con Euskaltel.
Paralelamente la nueva dirección ha puesto en marcha una política de fichajes de campanillas. Así, en la última asamblea a propuesta del presidente, Sebastià Salvadó, se aprobó el nombramiento de Florentino Pérez como miembro de la directiva del club de conductores. La presidencia de honor la ostenta Juan Antonio Samaranch. Y el piloto de rallies Carlos Sainz, se incorporó también a la dirección como vocal.