La OCDE anticipa inflexiones en la economía española en 2020
El indicador compuesto avanzado para España baja 18 centésimas en octubre, el mayor descenso mensual desde hace más de un año
Hace un año, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) avisó que había comenzado a ver signos de ralentización de la economía española, apelando a un indicador que empezaba a manifestarse a la baja. Ahora, ese indicador ha sufrido el mayor descenso mensual desde entonces, y el organismo advierte de posibles inflexiones económicas en el país en los próximos meses.
La alerta surge a raíz del indicador compuesto avanzado, que anticipa giros en el ciclo económico con entre seis y nueve meses de antelación. Durante el mes de octubre, este indicador bajó 18 centésimas para España hasta los 98,58 puntos, por debajo del 100 que marca la media de largo plazo. Hace un año, cuando la OCDE externó su preocupación al respecto, el indicador se situaba en 98,91 puntos.
Así, la organización se ratifica en su expectativa de empeoramiento del ritmo de crecimiento de la economía española, después de que en noviembre rebajó la previsión de crecimiento en dos décimas, hasta el 2%.El descenso del indicador compuesto avanzado es el mayor desde que empezó a deteriorarse en 2018 y el tercer mayor retroceso de los países de la OCDE.
Solo Estonia y Eslovenia han bajado más en este sentido que España, con 44 y 21 centésimas menos en sus indicadores, respectivamente. A la vez, la OCDE empieza a ver signos de estabilización en la evolución negativa que llevaba constatando desde hace meses en países como Estados Unidos, Alemania y el Reino Unido, aunque en este último hay márgenes de error por la incertidumbre en torno al brexit.
Las últimas advertencias de la OCDE
Las malas previsiones de la OCDE sobre la economía española se reflejan también en sus vaticinios sobre el crecimiento en 2020. En noviembre, la entidad rebajó en tres décimas su expectativa de crecimiento para el próximo año, hasta el 1,6%, frente al 1,7% que se prevé desde el Gobierno en funciones de Pedro Sánchez. Para 2021 se maneja la misma previsión del 1,6%.
La entidad también ha indicado que la deuda pública española seguirá a un nivel «elevado», pues solo bajará al 96,2% del PIB en 2021. Em este sentido, ha recomendado acometer políticas claras y esfuerzos estructurales para reducir la deuda en el futuro inmediato. También ha alertado que el consumo privado se ralentizará en 2021 hasta el 1,3%.