La nueva norma de créditos fiscales, decisiva para la subasta de Novagalicia
Con hasta 4.500 millones en juego, la entidad gallega se vuelve mucho más atractiva
Tal y como estaba previsto. La subasta de Novagalicia se cerrará con la nueva norma sobre créditos fiscales en vigor. La gran banca española interesada en la nacionalizada gallega reclamaba este paso, que ahora podría decantar la privatización.
Tras este movimiento del Ejecutivo, la entidad que preside José María Castellano se vuelve mucho más atractiva. En juego hay hasta 4.500 millones de euros si el comprador es un banco nacional y más de 2.000, si se trata de un fondo extranjero.
Nueva reforma
Este viernes, el Gobierno aprobó una nueva reforma que afecta directamente al sector bancario. Las entidades financieras reforzarán su capital con 30.000 millones de euros después de que el Consejo de Ministros haya dado luz verde a un decreto por el cual se modifican los activos fiscales diferidos (DTA) con el fin de que sigan manteniendo la condición de capital de máxima calidad tras la aplicación de la normativa sobre solvencia Basilea III.
Los créditos fiscales son una práctica bancaria que consiste en consignar en sus balances como activo real el ahorro en impuestos que permite la legislación al cerrar en pérdidas, aunque la realidad es que ese ahorro no se produce hasta que la entidad vuelve a tener beneficios. Son ahorros en impuestos futuros.
La directiva Basilea II establecía que los bancos podían considerar los créditos fiscales como capital de máxima calidad, algo que no sucede en Basilea III. Por ello, el Gobierno ha decidido modificar la normativa contable del impuesto de sociedades de estos activos para facilitar que los DTA continúen siendo capital de máxima calidad.
Subasta
El decreto beneficia a la subasta de Novagalicia. El propio ministro de Economía, Luis de Guindos, aseguró que el cambio normativo facilitará la privatización de la entidad gallega. Los derechos fiscales derivados del saneamiento serán aprovechados por la entidad compradora.
La entidad ha generado 4.500 millones de euros en activos fiscales diferidos, derivados de los resultados negativos registrados. De esta cantidad, NCG tiene anotados en balance algo más de 2.000 millones, pero en caso de pasar a integrarse en una entidad de mayor tamaño, capaz de generar suficientes beneficios en el futuro, podrían llegar a aprovecharse la totalidad.
Esquema de Protección de Activos
Pero, solucionado el tema de los créditos fiscales, todavía resta otra pata. Las entidades interesadas en Novagalicia ya han manifestado su intención de que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) active Esquemas de Protección de Activos (EPA).
Por el momento, el fondo bancario ya ha programado en el calendario realizar las pertinentes consultas a la Unión Europea ante la posibilidad de eventuales ofertas que planteen ayudas públicas. El interlocutor, en este caso, será la Dirección General de la Competencia, que dirige Alexander Italianer, bajo la batuta del comisario europeo Joaquín Almunia.