La misión imposible de los mileuristas para jubilarse a los 50
Para lograr una renta suficiente habría que ahorrar 500 euros al mes a partir de los 25 años y hasta los 60 y lograr una rentabilidad anual del 7%
¿Te imaginas poder jubilarte a los 50 años sin tener que trabajar y viviendo de las rentas? Muchas veces lo hemos soñado. Y es que uno de los deseos más ansiados por parte de los españoles es ahorrar el capital necesario como para jubilarse de manera anticipada.
Pero… ¿Es posible hacerlo? ¿Cuánto necesitamos ahorrar?
Como punto de partida cabe decir que es una opción muy complicada y muy difícil de alcanzar. Dicho lo cual, hemos realizado los cálculos con 3 supuestos para ver lo que tendrías que ahorrar cada año para retirarte de manera anticipada. Dos casos para hacerlo a los 50 años y uno más realista para que sea a los 60 años.
En este sentido, Paula Satrústegui, socia y directora de planificación patrimonial de Abante, es la experta que ha desarrollado todas las ideas de manera detallada en relación a la planificación financiera que hay que tener para alcanzar la difícil meta de jubilarse a los 50 años con suficiente colchón para vivir de las rentas.
Satrústegui señala que en todos estos escenarios se toma “una inflación del 2% todo el tiempo”. Así, los ejemplos parten de una persona joven, de 25 años. La esperanza de vida que utilizamos para hacer los cálculos es de 100 años, porque existe la posibilidad de que alcance esta edad. Por tanto, hay tres supuestos.
1. Una persona de 25 años que ahorra 500 euros al mes hasta los 50 años
El primer escenario se basa en un joven de 25 años que ahorra 500 euros al mes hasta los 50 años invirtiendo lo que va ahorrando, con el objetivo de jubilarse a esa edad. Es un opción bastante poco probable porque, por un lado, se quedaría con una paga mensual muy baja a lo que se sumaría que no tendría opción a pensión pública.
Este ejemplo sería el de una persona que desde los 25 años consigue ahorrar 500 euros todos los meses. Para incrementar lo que va ahorrando lo invierte en una cartera con una rentabilidad media anual del 7% (descontando la inflación, la rentabilidad sería el 5%) hasta los 50 años.
A partir de los 50 años, decide jubilarse y dejar de trabajar. Pero no saca todo el dinero de golpe de su cartera de inversión porque si lo sacara dejaría de tener rentabilidad. Lo que sí hace es mover esos ahorros a una cartera más defensiva, con menor riesgo y por tanto menor rentabilidad, pero más adecuada para su edad. En este ejemplo, la cartera tiene una rentabilidad media anual del 5% (inflación más el 3%).
Calculando los flujos de salida, porque va sacando cada mes para vivir, y cuánto va rentando el dinero restante podemos saber cuál puede ser la renta mensual de la que puede disponer esta persona que deja de trabajar a los 50 años y vive hasta los 100 años.
La experta de Abante hace el cálculo de que cuando alcance esa edad “habrá conseguido acumular 302.606 euros (euros actuales, sin contar el valor de la inflación a futuro)”.
A partir de los 50 años dispondría de una renta anual de “10.869 euros actuales anuales (en euros corrientes, sumándole una inflación anual del 2%, serían 18.189 euros)”. Es decir, esta persona contará “con unos 905 euros (actuales) al mes para vivir”, dado que no cobrará pensión de jubilación pública si se jubila a esa edad, puesto que no cumple con los requisitos; “salvo que realice un convenio con la Seguridad Social)”.
Este caso es bastante complicado de conseguir con un nivel de rentas mensuales que se encuentre en la media española, dado que habría que dedicar al ahorro casi el sueldo completo.
2. Una persona de 25 años que quiere tener una renta de 1.000 euros al mes entre los 50 y los 100 años
Otro supuesto es que tenemos 25 años y nos queramos jubilar a los 50 años con 1.000 euros al mes. Teniendo en cuenta una esperanza de vida, ¿cuánto tendríamos que ahorrar?
Satrústegui señala que si quieres disponer de 12.000 euros anuales de los 50 a los 100 años (20.081 euros anuales en euros del año 2046), “necesitarías ahorrar 6.629 euros anuales entre los 25 y los 50”. Esto sería una media de 552 euros al mes.
Para que salgan estas cuentas hay que tener en cuenta el mismo escenario que en el primer ejemplo, no vale solo con ahorrar sino que también hay que invertirlo. De esta forma, desde los 25 años hasta los 50 años iríamos metiendo este dinero en una cartera de inversión al 7% de rentabilidad media anual.
En ese momento, al igual que en el caso anterior no sacaríamos de golpe todo el dinero, sino que lo moveríamos a una cartera con un perfil menor de riesgo porque ya somos más mayores. En este caso lo moveríamos a una cartera con el 5% de rentabilidad media anual a partir de los 50 años.
En este caso, como se explicaba en el ejemplo anterior, no podríamos sumar la pensión pública porque la persona no cumple los requisitos necesarios:
- Tener 15 años cotizados a la Seguridad Social.
- Que 2 de esos 15 años estén comprendidos dentro del periodo desde esos 15 años inmediatamente anteriores a causar el derecho (la edad legal de jubilación, salvo cambios en la legislación, es los 67 años).
- Tener la edad legal de jubilación.
- Cesar de la actividad laboral.
Si el inversor dejase de cotizar a los 50 años, afirma Satrústegui, “no tendría derecho a recibir pensión de la Seguridad Social al no cumplir el segundo requisito (2 años cotizados en los 15 años anteriores a la edad legal)”. El interesado podría realizar un convenio con la Seguridad Social para tener derecho “a la prestación cuando deje de trabajar”.
3. El caso más realista… Una persona de 25 años que ahorra 500 euros al mes hasta los 60 años
Este supuesto se basa en que tengas 25 años y seas capaz de ahorrar 500 euros al mes hasta los 60 años, que vivas hasta los 100 años, e inviertas en una cartera que te dé una rentabilidad media anual del 7% hasta los 60. De esta manera, a partir de esa edad inviertes el dinero acumulado en una cartera que te dé una rentabilidad media anual del 5%.
¿Qué renta mensual tendrás entre los 60 y los 100 años? La directora de planificación patrimonial de Abante señala que, en este caso, se juntan dos factores que permiten a esta persona disfrutar de una jubilación “algo mejor”. Por un lado, al alargar 10 años el periodo de ahorro o acumulación “consigues más capital con el mismo esfuerzo”. Por otro, sí tendrías derecho a una pensión de jubilación de la Seguridad Social, “con lo cual contarías con algo más de dinero al mes durante su jubilación”.
Por tanto, esta persona habrá acumulado 473.122 euros actuales entre los 25 y los 60 años (entre lo que ha ahorrado y la rentabilidad obtenida por su inversión). Y puede disponer de unas rentas anuales por valor de 22.572 euros actuales anuales (46.046 euros) a partir de los 60 años y hasta los 100. Es decir, “cuenta con 1.880 euros al mes durante el periodo de rentas”, concluye Satrústegui.
Estos datos estarían calculados sin contabilizar la parte proporcional de la pensión pública, que no está incluida al no saber lo que vamos a cotizar ni lo que vamos a cobrar al retirarnos.
Noticia original: Business Insider
Autor: Héctor Chamizo