La factura anual de gas natural se encarece 53 euros en octubre
El Gobierno aprueba un aumento del 8,4% en las tarifas de gas natural por el encarecimiento de la materia prima
Si 2018 comenzó con una subida del 6% en la factura de gas natural, el año acabará con otro aumento. Ahora será del 8,4% en las tarifas de último recurso (TUR), las que tienen principalmente los consumidores domésticos, que suman casi dos millones de clientes.
La factura media del gas natural para una vivienda de cuatro personas actualmente es de 632,01 euros al año, según el comparador de precios Selectra, por lo que este encarecimiento encarecerá de media el precio otros 53,1 euros anuales, para terminar sobre los 685 euros.
Este incremento llega pocas semanas después de que el precio de la luz llegara a su máximo anual, a 75,39 euros de media por el megavatio-hora.
La materia prima dispara el precio del gas natural
Las tarifas subirán a partir del lunes 1 de octubre, según publica este sábado el Boletín Oficial del Estado (BOE). El incremento se debe a la importante subida del coste de la materia prima, del 22,7%.
Los precios regulados del gas encadenan una nueva subida tras la revisión para el periodo julio-septiembre, que repuntaron un 3,6% tras haber caído un 3,4% para el trimestre anterior.
Aunque la parte regulada de la factura sigue congelada por cuarto año consecutivo, otros factores influyen en la subida de precios. La cotización del barril de petróleo Brent se incrementó un 5,8% respecto al periodo de referencia anterior para el cálculo de la tarifa.
Además, el euro se depreció un 2,8% frente al dólar y los precios de los futuros del gas natural en el mercado de referencia europeo se sitúan cercanos a los 30 euros el megavatio-hora, un 50% más que en septiembre de 2017.
Este encarecimiento es el mayor registrado en 2018. La tarifa TUR es una de las modalidades para contratar el gas natural y su precio lo fija el Gobierno en revisiones trimestrales y está en vigor durante tres meses.
Esta es una tarifa para viviendas y consumidores domésticos que fija un límite de 50.000 megavatios-hora anuales para poder acogerse a ella. Los clientes que consuman más deben contratar el servicio en el mercado libre.