La fabricante de alimentos Marel se reestructura en Rubí tras la fusión de Stork Foods
La compañía islandesa aumenta su plantilla de 28 a 34 trabajadores tras la integración de los trabajadores de la empresa adquirida. El proceso culmina con la mudanza de la sede ibérica de Gavà a Rubí
La compañía islandesa Marel, dedicada a fabricar maquinaria de procesamiento de carnes, pollos y pescado y productos elaborados, ha reestructurado la empresa en España tras la adquisición en el 2009 de la holandesa Stork Foods.
La consecuencia de la integración internacional se traduce en España en la incorporación a Marel de seis trabajadores de la holandesa Stork, principalmente integrantes del equipo de postventa y servicio técnico, y el traslado de la sede de España de Gavà a Rubí.
La adquisición de Stork en el 2009 en una transacción de 9 millones de euros ha permitido a Marel ampliar su línea de producción de maquinarias de pescado y de carne a la de pollos. Desde la fusión, ambas compañías habían trabajado en paralelo pero ahora han decidido fusionarse completamente.
La nueva compañía ha creado un holding en Holanda de la que actualmente dependen unas 30 filiales y donde trabajan 3.700 personas. La operación en España, que tuvo un coste de 150.000 euros, fue financiada con recursos de Stork.
La empresa cuenta con 14 fábricas que producen enormes maquinarias de procesamiento de productos alimentarios (excepto frutas y verduras) en Inglaterra, Singapur, Estados Unidos, Islandia, Holanda, Estonia y Dinamarca. Entre sus clientes, destacan en España algunos grandes productores como Campofrío y Pescanova.