La crisis del coronavirus deja a 300.000 autónomos al borde del cierre
Cerca de un millón de trabajadores por cuenta propia arrastra pérdidas de más de 30.000 euros como consecuencia de la pandemia, según el barómetro de ATA
La crisis del coronavirus ha sacudido con fuerza el negocio de los trabajadores autónomos que han ido empeorando sus posibilidades de sobrevivir conforme la pandemia iba ganando terreno en cada oleada de contagios. Cerca de 300.000 empleados por cuenta propia prevén que se verán obligados a cerrar a lo largo del 2021 por las dificultades económicas que arrastran.
El último barómetro elaborado por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) ha revelado una fotografía desoladora del sector. Un millón de empleados por cuenta propia arrastra ya pérdidas superiores a los 30.000 euros desde que se desencadenó expansión de la Covid-19.
«Ha sido un año horrible para miles de autónomos que han tenido que reducir sus plantillas, tener pérdidas de las cuales no saben si se va a recuperar y, en ocasiones, tener que echar el cierre en la ruina más absoluta», ha expresado el presidente de ATA, Lorenzo Amor.
Los trabajadores autónomos pagan las consecuencias de las restricciones
Los autónomos han sido uno de los sectores que más han sentido el efecto de las restricciones sanitarias, que se han puesto en marcha con la entrada de la tercera oleada de coronavirus que ha arrojado cifras de récord de contagios en el mes de enero, pero que ya ha logrado comenzar a remitir hasta rebajar la incidencia acumulada por debajo del umbral de riesgo extremo.
El barómetro estima que 68,6% de los trabajadores por cuenta propia padece actualmente algún tipo de medida sanitaria que le impide llevar con normalidad su negocio. Buena parte de las comunidades autónomas han aplicado severos planes de choque que han provocado el cierre de los negocios no esenciales, entre ellos la hostelería, el comercio o el deporte.
La Federación de Trabajadores Autónomos calcula además que 565.000 negocios han tenido directamente que paralizar por completo su actividad. Representan un 17,4% del total de los trabajadores por cuenta propia que operan en el país en distintos rubros.
El resultado es una caída generalizada de la facturación de sus negocios. Un 81,2% de los encuestados en el último barómetro ha reconocido que arrastra pérdidas mayores a las del año anterior. Mientras que apenas un 3,5% ha logrado elevar su volumen de negocio con más beneficios que antes de que se desencadenara la pandemia.
Los autónomos se abrazan a la llegada de ayudas
La amenaza de la destrucción de 300.000 negocios ha incrementado las peticiones del colectivo de una inyección económica que les permita mantener su liquidez y evitar el cierre en el próximo curso. Una demanda que no ha parado de repetirse desde el inicio de la pandemia.
“Necesitamos un plan urgente de medidas económicas que establezca ayudas directas, un plan de emergencia que permita a los autónomos enfrentarse a los próximos meses, amortiguar la caída de la actividad y evitar el cierre de empresas, autónomos y por ende, la destrucción de empleo”, ha expuesto Amor.
Las peticiones coinciden con el anuncio que Pedro Sánchez ha realizado esta misma mañana en el Congreso de los Diputados. El presidente del Gobierno movilizará un total de 11.000 millones de euros en ayudas que sirva como colchón tanto para las pequeñas y medianas empresas como para los autónomos.
Aunque no se ha dado un balance desagregado sobre cómo llegarán estas subvenciones hasta los trabajadores por cuenta propia, el objetivo es que tengan un impacto directo en algunos sectores hundidos por la Covid-19 como la hostelería o el comercio.