La banca andorrana insta a los inversores catalanes a cambiar de paraíso fiscal
Los ahorradores con fondos opacos están acobardados con el cambio de legislación sobre secreto bancario que regirá en el Principado a partir de febrero
Andorra deja de ser un paraíso fiscal en 2011. Al menos, en teoría. En la práctica, el acuerdo de intercambio de información fiscal con solicitud previa que el Gobierno de Andorra y el Ejecutivo español firmaron a principios de este año deja menos resquicios para seguir practicando la ingeniería financiero-fiscal, especialidad en la cual la banca del Principado se ha doctorado en los últimos años. Un 16% de la riqueza del pequeño país procede de su sector financiero.
El 10 de febrero de 2011 entrará en vigor el convenio entre España y Andorra. Aunque en un inicio el acuerdo era aplicable a partir del 1 de enero, las modificaciones posteriores de noviembre pasado han alargado otro mes las posibilidades de los inversores con capitales depositados en el estado pirenaico para regularizar su situación o buscar alternativas a la opacidad que Andorra ha significado históricamente para quienes han querido alejar sus ingresos del fisco español.
“Los bancos me proponen cambiar mis depósitos a otros paraísos fiscales, la Isla de Man, Panamá, Singapur u otros”, asegura un inversor temeroso del cambio normativo que entrará en vigor en febrero próximo. “Una parte la he repatriado a España y la he regularizado. Pero, ahora, con el resto, me da miedo desoír al banco andorrano pues pueden acabar denunciándome a la Hacienda española”, confesaba en los últimos días un empresario barcelonés que, por razones obvias, solicitó el anonimato personal y el de la entidad a la que se refería.
Pequeños y medianos empresarios
Expertos en el sector financiero andorrano consultados por Economía Digital, señalan que ese mercado no es un enclave atractivo para grandísimas fortunas. Al contrario, el tipo de evasor que prolifera en sus sucursales bancarias tiene otro perfil. “Aquí vienen pequeños y medianos empresarios de Barcelona, algunos de ellos jugándose el tipo con dinero en efectivo. También mucho constructor de éxito. Siempre ha sido así y lo que buscaban era ahorrarse los impuestos de pequeñas sumas”, asegura un especialista bancario andorrano. “Las grandes fortunas que quedaban –añade– están todas deslocalizadas desde hace meses”.
Un tercio del negocio financiero andorrano está basado en productos fuera del balance (Sicavs, fondos de inversión, planes de pensiones). El final del negocio off-shore está llevando a la banca del estado vecino a proponer a los clientes con esas características registrar sus operaciones en otras plataformas como Bahamas, Panamá e, incluso, Luxemburgo.
En esa situación se halla un buen grupo de inversores catalanes que durante años han gozado de la opacidad fiscal de la banca andorrana para esconder capitales en el país vecino. Mientras mercados emergentes como el de Singapur goza de gran impunidad para el dinero negro, los acuerdos que diferentes plazas financieras del ámbito de la OCDE han firmado con España y otros países de la Unión Europea (UE) en los últimos meses está reduciendo las posibilidades de mantener esas prácticas.
Retener saldos en el país
De hecho, fuentes de la banca andorrana han confirmado a este diario que varias entidades están llevando a cabo una fuerte presión sobre algunos clientes para retener sus imposiciones en el país vecino. A los inversores que escapan al fisco, la continuidad de sus fondos en entidades andorranas les producen no pocos temores de ser descubiertos por la Hacienda española.
No extraña, por tanto, que la patronal bancaria del pequeño principado (que reúne a las principales entidades operativas en el país) se esfuerce en recordar a sus clientes españoles que el acuerdo de facilitar información no tiene efectos retroactivos. Es decir, la Agencia Tributaria podrá solicitar determinados datos sobre saldos y movimientos bancarios, pero jamás anteriores al 10 de febrero de 2011, fecha de vigencia del acuerdo. Además, el lobby financiero andorrano se afana en explicar que “es necesario que la petición esté debidamente fundamentada con indicios y pruebas suficientes demostrando que existen cuentas en Andorra”, según reza en una nota publicada en su página web.
¿Un paraíso fiscal internacionalizado?
La indecisión de los ahorradores sobre la continuidad o no de sus fondos en la plaza vecina ha llevado a algunos bancos a utilizar sus sucursales y corresponsalías en otros paraísos fiscales para ofrecer el traspaso de esos fondos opacos sin sufrir una pérdida de depósitos notable. La apertura bancaria del Principado y su homologación fiscal con la UE puede suponer una disminución de la actividad financiera tradicional, según explican fuentes del sector,
Andbanc, BIBM, Crèdit Andorrà, Banca Privada de Andorra y Banc Sabadell d’Andorra (el único sin presencia internacional) conforman la totalidad de entidades que operan en ese mercado. La participación de bancos españoles en el capital se ha reducido hasta desaparecer en la mayoría de los casos. Únicamente el Banc Sabadell mantiene su filial activa, mientras que BBVA, La Caixa y Caixa Catalunya se retiraron del negocio a finales del siglo pasado o principios del presente.