La Audiencia Nacional se desentiende de las preferentes de Bankia

La deriva judicial sobre la comercialización de preferentes entra en una nueva fase que, presumiblemente, beneficiará a los ahorradores. En concreto, la Audiencia Nacional ha interpretado que las demandas contra Bankia –el proceso acumula más de 15.000 folios– deben resolverse en los juzgados de instrucción del lugar de comisión del presunto delito. Miles de pequeños inversores han denunciado a los directores de las oficinas y a los comerciales de la entidad por presunta estafa. El caso no sólo afecta al banco presidido por Ignacio Goirigolzarri, sino a otras franquicias como Novagalicia.

La decisión acelerará los plazos hasta que se redacten las sentencias y deja abierta la posibilidad de recurso en caso de que los juzgados locales fallen contra los intereses de los demandantes. Manos Limpias aclara que se ha dado un paso adelante importante, sobre todo en “economía procesal”. El secretario general, Miguel Bernat, destaca que ahora “hay más opciones para los inversores que se sienten estafados”. Bankia, por su lado, matiza que “no comenta las decisiones judiciales” y aún no ha valorado la nueva realidad.

Tutela judicial

En concreto, la Audiencia Nacional ha aceptado la impugnación presentada por los fiscales Alejandro Luzón y Luis Rodríguez contra el auto del juzgado número 13 de Madrid. La sala entendió que no debía valorar si el responsable de la sucursal 1199 de Caja Madrid cometió un delito de estafa. El juez argumentó que la fusión entre cajas que dio pie a Bankia extendía los hechos a todo el territorio nacional. Según esta interpretación, la sala local debía elevar el caso a la central.

Sin embargo, los fiscales opinan que si la inhibición se hubiera hecho efectiva, se “vulneraría el principio constitucional de tutela judicial efectiva”. Por ello, solicitaron que las denuncias contra directores y comerciales no fueran competencia del juzgado central de instrucción. De este modo, la Audiencia Nacional devuelve el caso. El juez coincide con los fiscales en que “los hechos están perfectamente perimetrados”.

Todo tipo de afectados

Las preferentes de Bankia, aunque no son las únicas, sí afectan al mayor número de pequeños ahorradores. Se trata de un problema financiero de alcance nacional. Las emisiones son sólo una parte de la polémica. La deriva de la acción, se calcula que hasta 130.000 inversores minoristas tienen acciones y preferentes, ha generado malestar y minusvalías. El precio de la acción ronda el euro, en su colocación superó los tres. Aunque los clientes de las oficinas no son los únicos afectados. Varias entidades, como la ONCE, se han visto salpicados por la degradación del valor de la otrora tercera entidad privada española.