La jornada laboral de cuatro días arrancará en 2022 en España con 160 empresas
Las 32 horas semanales impulsadas por Más País en los Presupuestos de 2022 llegarán a más de 3.000 trabajadores, con ayudas de entre 2.000 y 3.000 euros por empleado
La semana laboral de 32 horas llegará finalmente en 2022 a mayor escala a España a través de un proyecto piloto de ayudas a empresas impulsado por Más País en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2022 que podría beneficiar a unas 160 empresas y más de 3.000 trabajadores.
Estos son los cálculos realizados por la formación de Íñigo Errejón en el borrador trasladado esta semana al Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, en una reunión a la que acudió el responsable político del partido en el Congreso, Héctor Tejero, también representantes de Compromís, como Joan Sanchis, según han informado a Economía Digital en fuentes de Más País
La medida pactada por el Gobierno con Más País, que busca reducir el número de días laborales sin que se contemple recorte salarial alguno para los trabajadores y sigue la estela del proyecto piloto en fase de desarrollo en la Comunidad Valenciana, viene reflejada en una partida de 10 millones de euros en los PGE de 2022.
Borrador de ayudas en un mes y mayor dotación
El Ministerio de Industria se ha comprometido a presentar antes del próximo 15 de noviembre una orden en la que se detalle la regulación de los incentivos a empresas con el fin de que pueda implementarse en el inicio del ejercicio 2022.
Además, no descarta que la dotación inicial de 10 millones de euros pueda ampliarse en el primer año de implementación (2022) si hay una elevada demanda de ayudas, recurriendo a otras partidas con remanentes que no se hayan utilizado, según trasladó Industria en una reunión en la que hubo «buena sintonía», según las mismas fuentes.
Para los siguientes ejercicios Industria ha dado su compromiso de una partida plurianual de 50 millones de euros, por lo que en 2023 la dotación del proyecto podría subir a 15 o 20 millones de euros y repetirse los ejercicios siguientes.
El programa piloto de la Comunidad Valenciana para la semana de 4 días laboral también contará a priori con un presupuesto de 10 millones de euros, sin reducción de salarios. Las empresas participantes recibirán una compensación por el día de trabajo que se pierde que sería del 100% el primer año, del 50% el segundo año y del 25% el tercer año.
Ayudas de entre 2.000 y 3.000 euros en función del tamaño de las empresa
Aunque el borrador de ayudas se fijará en un mes, el borrador que maneja Más País, enfocado más hacia el lado de la innovación frente al enfoque más laboral del proyecto de la Generalitat Valenciana, realizado desde el servicio público de empleo valenciano, estima un alcance del proyecto de 160 empresas y 3.000 trabajadores el próximo ejercicio.
Con un límite de empresas de 250 trabajadores, la propuesta contempla una ayuda para las empresas de entre 2.000 y 3.000 euros al año por trabajador afectado por la media, siendo la menor cuantía para las empresas de mayor tamaño y el mayor volumen para las pymes.
Para obtener estas subvenciones, las empresas deberán realizar un proyecto de rendición de jornada laboral que explicite cómo se va a conseguir y en el que introduzcan los gastos a financiar con las ayudas.
El borrador de costes laborales podría contemplar, entre otros, sus previsiones de contratar a un trabajador para cubrir la jornada suprimida, el coste en formación, una posible consultoría para acometer una reorganización productiva o de innovación, así como posibles ayudas para maquinaria.
Los expertos cuestionan la medida para España por sus características
Algunos de los expertos consultados por Economía Digital consideran que España no reúne las características idóneas para contemplar la implantación de una semana laboral de 32 horas, máxime en el actual momento de reactivación en el que el optimismo sobre la mejora económica se ha visto en parte truncado por la rebaja del INE del crecimiento del segundo trimestre hasta el 1,1%.
“España tiene todas las características estructurales para ser el país menos apropiado para hacer esto”, afirmó tajante en declaraciones a Economía Digital la economista senior de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas), María Jesús Fernández, al considerar que solo tendría sentido en su opinión en determinados sectores “muy dinámicos”, con crecimiento muy rápido ligados a las nuevas tecnologías, tanto en la industria como en los servicios, algo que en España no tiene mucho peso.
Su implantación de forma generalizada es “impracticable” a su parecer, ya que presenta una productividad por debajo de la media de los países de la Eurozona y podría verse agravado este problema, además de por el elevado peso de las pequeñas empresas, que presentan el 98% del tejido productivo.
El presidente de la Comisión Financiera del Consejo General de Economistas (CGE), Antonio Pedraza, también afirmó a Economía Digital que “no es el momento más oportuno”, a pesar de que cree que es algo “absolutamente inexcusable” a medio plazo.
Del ‘fracaso’ en Telefónica a otros casos de implementación
Con todo, la semana laboral de 4 días ya se está aplicando en varias empresas desde hace meses en España, aunque en algunas no ha tenido el resultado esperado, como en el caso de Telefónica, un total de 156 trabajadores se apuntaron al proyecto piloto para acogerse a una jornada laboral de solo 4 días a la semana.
Telefónica fue la primera gran empresa española en dar el paso al frente hacia la implantación de la semana laboral de 4 días, si bien a principios de este mes la firma de moda Desigual aprobó la jornada laboral de cuatro días, con un 86% de apoyo por parte de los trabajadores.
Los empleados tendrán una jornada de lunes a jueves, incluyendo tres días presenciales y uno de teletrabajo. Un total de 502 empleados pasarán de una jornada de 39,5 horas a la semana a otra de 34,5 horas, aparejado a una reducción salarial del 6,5%, compartida entre empresa y trabajador.
Ley de usos del tiempo: flexibilidad en la jornada
Más allá del proyecto piloto para la implantación de 32 horas, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, anunció a finales de septiembre la reforma de la ley de usos del tiempo en el trabajo el próximo año para dar a los trabajadores tiempo para los cuidados, así como para la formación, de forma que se introduzcan fórmulas flexibles para la jornada en las empresas y también para los trabajadores, en línea con los modelos nórdicos.
Sobre la semana de 4 días laborales, Díaz dejó claro que todo se abordará en el seno del diálogo social, donde se tendrán que hacer “muchos equilibrios”, pero avanzó que el Ministerio de Trabajo no aboga por una “formulación rígida de la jornada laboral”, ya que “el mundo no funciona con planteamientos rígidos y la característica del mundo empresarial del siglo XXI está sustanciada en la flexibilidad”.
La idea de Trabajo es regular para lograr una jornada laboral análoga a la de los modelos nórdicos, con flexibilidad, frente a otros ms rígidos, de forma que los trabajadores participen en el diseño de su jornada, con el fin de aumentar su productividad, y que tengan tiempo para la formación y los cuidados, con excedencias para ese fin como “núcleo central de las empresas”.
DE sigual 86% votos a favor.