Javier Bernal: los directivos de BBVA también son de letras
‘El enigma de Rania Roberts’ es su primera obra sobre la manipulación de los mercados y el conflicto entre Israel y Palestina
Javier Bernal es una rara avis de la banca española. Directivo de BBVA, se estrena como escritor con El enigma de Rania Roberts, un trhiller financiero al que no le falta ningún ingrediente: desde el conflicto político entre Israel y Palestina hasta la manipulación de los mercados desde los despachos de Nueva York. Incluso el control de los medios con una dosis de romanticismo.
Acostumbrado a los números, Bernal sucumbe a las letras en sus ratos libres para evadirse del mundo. Se lanzó a la literatura hace más de tres años. Como hombre de matemáticas, lo tenía todo controlado desde el primer momento. No había tiempo para la improvisación. En un verano, estructuró una historia político-financiera que giraría entorno a Rania: una joven alegre y de vida sencilla en Jericó que, tras un episodio traumático, viaja a la ciudad de los rascacielos para convertirse en una Rania más observadora.
La banca de inversión, un mundo de adrenalina
Bernal quería que una mujer protagonizara su obra novel para llegar a un lector más generalista, explica. En torno a ella, la trama se centra en la banca de inversión y la frenética vida de esos lobos de Wall Street. Los personajes encarnan a directivos sin escrúpulos y cínicos que saben mover los hilos de los medios de comunicación.
Amigos de sus enemigos y personas muy inteligentes capaces de lo que sea por seguir triunfando en las financias. Pero también hay espacio para personajes honestos, periodistas rigurosos o militares con principios.
“La banca de inversión es un mundo de adrenalina. Ganan mucho dinero a edades muy tempranas, pero trabajan muchísimo. Mucha gente está unos años o el propio sistema te saca. Es durísimo”, sostiene Bernal.
Se refiere a una vida desconocida para la gran mayoría en la que los Ferrari o los millones caen del cielo con tan solo decidir dónde invertir y cuándo. Este directivo conoce el mundo neoyorquino porque vivió una temporada en la Gran Manzana. Asegura que sus personajes no responden a un perfil concreto. Que no les pone nombres y apellidos. Pero confiesa que quería que fueran familiares a ojos del lector. Que evocaran, precisamente, esos nombres que han copado los titulares de diarios durante la crisis.
Precios y locales reales
El ahora también escritor quería que el lector “pudiera explorar otros mundos, que a lo mejor ha oído pero que no conoce tanto, como el estilo de vida de Nueva York o la vida humilde de Jericó”. Todo ello, con nombres de locales, precios de menús o calles reales. Su esposa le ayudó a la hora de documentarse y actualizar esos datos que él mismo había conocido en primera persona años atrás.
Bernal asegura que su entorno laboral se lo ha pasado muy bien con su primer thriller. Ha recibido buenas vibraciones, pero asegura que no trasladaría la trama al mapa español. “La banca de inversión en España es limitada” frente a la vida que genera en la city de Londres, en Nueva York o Hong Kong.