El IPC sube un 6,1% en enero con la gasolina disparada un 23% y la electricidad un 46%
El dato de IPC es una décima superior al adelantado por el INE pero se modera cuatro décimas respecto a diciembre por la bajada del precio de la electricidad, aunque sigue disparado, en tanto que los carburantes tiraron al alza
La cuesta de enero de 2022 fue de las más duras de los últimos años. La inflación siguió disparada en España en el arranque del año a pesar de moderarse ligeramente cuatro décimas, hasta situarse en el 6,1% en enero, principalmente como consecuencia de la moderación de los precios de la electricidad, aunque su precio siguió disparado un 46,4%, al tiempo que la gasolina (+23,1%) y el gasóleo (+25,7%) tiraron al alza, al tiempo que subieron los precios de la carne, el aceite de oliva o la fruta.
El dato supone una décima más de lo adelantado a finales del pasado mes por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y, además, refleja la decimotercera tasa positiva consecutiva, según los datos definitivos ya con la nueva base 2021, que incorpora nuevos artículos como las mascarillas higiénicas y la suscripción al periódico on-line, aunque no ha incorporado aún el nuevo cálculo del mercado libre de la electricidad hasta recabar la información con las compañías eléctricas.
Asimismo, se rompe la tradicional moderación de los precios que suele producirse en el mes de enero como consecuencia del menor consumo tras el periodo de Navidad y el efecto de las rebajas. De hecho, perpetua su récord con un alza no registrado desde el año 1991. Sin tener en cuenta las últimas variaciones de impuestos, la tasa interanual sería del 7% en enero, según el índice a impuestos constantes del INE.
Por su parte, la tasa de variación anual estimada de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) aumenta tres décimas, hasta el 2,4%, más de 3,5 puntos por debajo del IPC general pero la tasa más elevada desde octubre de 2012. Esta evolución es relevante porque tal y como se señala desde el Gobierno es el indicador en el que más se está fijando para medir el pulso de la evolución de los precios en España. El índice de precios de consumo armonizado (IPCA) se situó en el 6,2% en enero, cuatro décimas menos.
Se confirma un arranque del año con pérdida de poder adquisitivo, ya que la subida fijada por el Gobierno en los Presupuestos de 2022 para las pensiones contributivas fue del 2,5%, mientras que para las no contributivas del 3%, por un importe de 6.500 millones para 11,5 millones de pensionistas, en ambos casos por debajo del IPC definitivo de enero. También pierden poder adquisitivo los funcionarios, ya que para los empleados públicos se fijó una subida salarial del 2%, así como los 4,1 millones de trabajadores de los 1.554 convenios colectivos registrados en enero, ya que los salarios pactados subieron de media un 2,01% en el primer mes del año, a los que se suman los casi dos millones de trabajadores con salario en el nivel del Salario Mínimo, puesto que Gobierno y sindicatos han pactado un alza del 3,6%, pasando de 965 euros al mes a 1.000 euros en 14 pagas.
Las previsiones del Banco de España sugieren una inflación en España, medida por el IAPC, repuntaría desde el 3% en 2021 hasta cerca del 4% en 2022, pero con una desaceleración progresiva, sobre todo en la segunda mitad del año, que llevaría a que esta se situara por debajo del 2 % al final de este año y en los siguientes ejercicios.
Vestido, calzado y gasolinas tiran al alza, la electricidad a la baja
Estadística explica que los grupos con mayor influencia positiva en el IPC de enero fueron vestido y calzado, con una tasa del 3,7%, casi tres puntos mayor que la del mes anterior, causada porque los precios de todos sus componentes descienden este mes menos que el año anterior, y transporte, cuya variación se sitúa en el 11,3%, cuatro décimas por encima de la registrada en diciembre, debido a que los precios de los carburantes y lubricantes para vehículos personales suben este mes más que en enero de 2021.
Por el contrario, los grupos que aminoraron el IPC fueron vivienda, con una variación del 18,1%, más de cinco puntos por debajo de diciembre debido a la bajada de los precios de la electricidad (-3,5% mensual), frente la incremento registrado en 2021. Eso sí, los precios del gas subieron un 12,1% anual y un 6% mensual.
En cuanto a los alimentos y bebidas no alcohólicas, situaron su tasa en el 48%, dos décimas menos que en diciembre, por los precios de legumbres y hortalizas y del agua mineral, refrescos, zumos de frutas y vegetales subieron el año pasado más que este mes. El pan y los cereales han sido más caros, mientras que los aceites y grasas se han mantenido estables. El ocio y cultura descendió su variación cinco décimas, hasta el 1,2%, por la bajada de los paquetes turísticos.
Con todo, las mayores subidas respecto a enero de 2021 se dieron en la electricidad (+46,4%, sin las variaciones de los impuestos de la luz habría subido un 67,5%), combustibles líquidos (+44,6%), otros aceites (+37,9%), butano y propano (+33,5%) y aceite de oliva (+30,1%). Pese a las rebajas, las prendas de vestir para hombre (+5%) y para mujer (+4%) y niños y bebés (+2,6%) se ha encarecido, aunque respecto a diciembre bajaron un 14% por las rebajas. Suben alimentos básicos como el pan (+5,3%), la carne de vacuno (+6%), el pescado (+5,9%), la leche (+6,6%), los huevos (+6,6%) o las patatas (+2,8%).
Por el contrario, las mayores bajadas anuales se dieron en los peajes, aparcamientos públicos y parquímetros (-21%), los vuelos internacionales (-9,1%), los equipos de telefonía móvil (-5,2%), el transporte de pasajeros por mar (-3,5) y los ordenadores personales (-1,9%).
La tasa anual del IPC disminuyó en enero respecto a diciembre en todas las comunidades autónomas, excepto en Galicia, donde se incrementa una décima. Mientras, los mayores descensos se produjeron en Aragón (+6,6%), Cantabria (+6,2%), Castilla y León (+6,7%), Comunidad Valenciana (+6,2%), Extremadura (+6,5%) y Comunidad de Madrid (+5,6%), con bajadas de seis décimas en todas ellas.