La inversión en empresas emergentes españolas cae a la mitad en el primer semestre
La incertidumbre económica y la depreciación de los gigantes tecnológicos impactan en el ecosistema emprendedor español, registrando su peor trimestre desde 2020
La inversión en empresas emergentes españolas ha sufrido una drástica caída del 49% durante el primer semestre de 2023, alcanzado un total de 1.015 millones de euros, según el último informe del Observatorio del Ecosistema de Startups de la fundación Bankinter. Este descenso se atribuye a la persistente incertidumbre económica y a la depreciación de los gigantes tecnológicos, generando un clima de cautela entre los inversores.
Durante este período, se llevaron a cabo 207 operaciones de inversión, marcando una disminución significativa en comparación con las 241 operaciones registradas en el mismo periodo del año anterior. El primer trimestre experimentó una reducción del 46,2% en la inversión, llegando a aproximadamente 660 millones de euros a través de 104 operaciones. El segundo trimestre registró una caída aún más pronunciada, con un descenso del 53%, alcanzando los 355,6 millones de euros distribuidos en 103 negociaciones.
El ecosistema emprendedor español ha atravesado un periodo de desaceleración desde el segundo trimestre de 2022, y actualmente los niveles de inversión se encuentran considerablemente por debajo de los registrados durante el año 2021, que marcó un récord histórico en inversión en startups.
Varios factores se han sumado a esta desaceleración, entre ellos la guerra en Ucrania, la disminución en la valoración de los gigantes tecnológicos y la quiebra de instituciones financieras relacionadas directa o indirectamente con el ecosistema global. Estos factores, combinados con las valoraciones en alza de las startups españolas en los últimos años, han llevado a una mayor prudencia por parte de los inversores de capital riesgo.
A pesar del actual contexto desafiante, expertos señalan que se perciben «vientos de mejora y opiniones más optimistas» para el final del año y el próximo 2024. Algunos fondos de inversión han adoptado una postura más cautelosa, esperando a que las condiciones se estabilicen antes de realizar nuevas inversiones.
Cae el valor medio
El valor medio de las operaciones durante el primer semestre de 2023 se situó en 4,9 millones de euros, mostrando una disminución del 40,3% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Durante este semestre, se registraron cuatro rondas de financiación superiores a los 50 millones de euros, en contraste con las ocho rondas del primer semestre de 2022. Además, tan solo dos de estas rondas superaron los 100 millones de euros, en comparación con las cinco del año anterior.
Los fondos de capital riesgo fueron la principal fuente de inversión en empresas emergentes durante este periodo, con una inversión de 380,74 millones de euros, aunque esta cantidad disminuyó un 68% en comparación con el ejercicio anterior. Por otro lado, los fondos corporativos invirtieron 289,7 millones de euros, un 29% menos interanual, mientras que las operaciones de microfinanciación colectiva alcanzaron los 9 millones de euros, la mitad que el año anterior.
Baja la inversión extranjera
La inversión extranjera disminuyó un 65% durante los primeros seis meses de 2022, alcanzando los 254 millones de euros, mientras que la inversión local experimentó un aumento del 43% hasta los 340 millones de euros.
En cuanto a los sectores, las empresas de tecnología financiera (fintech) y seguros (insurtech) recibieron la mayor inversión durante el primer semestre de 2023, con un total de casi 155 millones de euros, representando aproximadamente el 16% del total invertido. Sin embargo, estas cifras muestran un descenso del 28% en comparación con el año anterior. Los sectores de movilidad y logística, así como turismo y viajes, también recibieron inversiones significativas, con 141,9 millones de euros (-37%) y 122 millones de euros (-72%), respectivamente.
Aunque tres sectores lograron mejorar sus cifras en comparación con 2022, la mayoría de los sectores experimentaron una disminución en la inversión.
Ciudades a la cabeza: Barcelona y Madrid
En términos de ubicación geográfica, Barcelona y Madrid fueron las principales ciudades receptoras de inversión, tanto en volumen como en actividad. Barcelona registró 67 operaciones que sumaron 527 millones de euros, mostrando una disminución del 47%. Por su parte, Madrid registró 73 operaciones por un total de 349 millones de euros, lo que representa una caída del 49%.
Otras regiones de España también experimentaron una disminución en la inversión durante el primer semestre de 2023, la Comunidad Valenciana, con casi 30 millones y el País Vasco, con 19 millones.