La inversión inmobiliaria se desploma un 34% hasta los 2.876 millones

El sector inmobiliario español se ha desplomado un 34% durante el primer trimestre del año hasta alcanzar los 2.876 millones de euros, unas cifras que reflejan una caída en comparación con el mismo periodo del año anterior, cuando el volumen de inversión se situó en los 4.300 millones de euros. Así lo reflejan los datos difundidos por la compañía especializada en consultoría y servicios inmobiliarios CBRE, que ha subrayado que la inversión sigue la tendencia de los últimos cuatro años y se ha elevado un 37%, respecto los datos de 2019, antes del estallido de la crisis sanitaria originada por el coronavirus.

Destacan especialmente los datos relativos a las grandes capitales del país. Pues, Madrid y Barcelona se situaron a la cabeza de la inversión inmobiliaria entre enero y marzo de este año, concentrando entre las dos el 60% del volumen de la inversión inmobiliario. De esta manera, han sobrepasado el peso que tuvieron en el mismo periodo de 2022, que fue del 52%, y han logrado un porcentaje que no tenían desde 2019.

En el primer trimestre ha destacado la actividad de los gestores de patrimonios familiares (‘family offices’) e inversores privados, que han concentrado el 17% del volumen total transaccionado, muy por encima del 5% que representó en todo 2022. Por nacionalidades, el inversor español lideró la inversión, con el 30% del volumen total, seguido del estadounidense, con un 23%, y francés, con un 13%.

La volatilidad lastra la inversión inmobiliaria

La directora de mercados de capitales de CBRE España, Paloma Relinque, ha señalado que el volumen de inversión inmobiliaria en los tres primeros meses del año está en línea con las previsiones de reducción de en torno al 30% que hicieron a comienzos de año, debido a la elevada volatilidad y a que 2022 dejó volúmenes de inversión récord.

Riquelme ha destacado el auge de las operaciones por parte de los gestores de patrimonios familiares frente a las de inversores institucionales en el primer trimestre, menos dependientes de financiación y con mayor capacidad de liquidez, una tendencia que pronostica que seguirá en los próximos meses.

El sector residencial concentra el 42% de la inversión

Por volumen de operaciones, en el primer trimestre sólo se registraron cinco por encima de los 150 millones de euros y en cuatro tipologías: residencial, oficinas, hoteles, y hospitales, clínicas y residencias (‘healthcare’). En todo 2022 hubo trece operaciones por encima de ese importe y el promedio de los últimos cuatro años fue de diez anuales.

El sector residencial concentró en el primer trimestre de 2023 el 42% de la inversión total, con más de 1.219 millones de euros en operaciones. Destacó la operación de la empresa conjunta (‘joint venture’) entre Greystar y Vía Célere, con un volumen de 400 millones de euros, o la compra por parte de DWS de un paquete de 1.763 viviendas de Culmia en el Plan Vive. En el mismo periodo de 2022, el sector residencial representó el 25% de la inversión total, siendo también el primer activo por volumen de inversión.

En cuanto al segmento de oficinas, registró el 19% de la inversión total, con 557 millones y se colocó en segunda posición, frente a la cuarta que ocupaba en 2022, destacando la operación de compra del inversor privado Vapat de los edificios de Colonial. En el segmento de hoteles, la caída interanual fue del 63,31%, pasando de 995 millones en el primer trimestre de 2022 a 365 millones en el mismo periodo del presente año.

El sector logístico concentró el 10% de la inversión total del trimestre, con 293 millones de euros, y se situó en cuarto lugar, seguido por los de hospitales, clínicas y residencias, y comercio (‘retail’), con 240 millones y 201 millones de euros, respectivamente.