El impacto de la crisis: solo se ha recuperado un 60% del tejido empresarial
La mayor incidencia de la crisis en el tejido empresarial se concentra en las pymes y en el sector servicios, especialmente en la hostelería.
Desde el inicio de la pandemia en marzo del año pasado han transcurrido ya 17 meses y sin embargo los estragos económicos aún están lejos de superarse. Tras el fuerte impacto del estallido de la pandemia en el tejido productivo, con una
pérdida de más de 91.000 empresas sólo entre marzo y abril de 2020, se apreció una recuperación muy paulatina.
Sin embargo, España todavía no ha recuperado el tejido empresarial previo a la crisis del coronavirus. Hasta finales de julio solo se había logrado recuperar el 60% del tejido empresarial previo a la pandemia en datos desestacionalizados, lo que supone una pérdida media de 44.640 empresas respecto al mismo periodo de 2019, último estudio publicado por la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme).
Actualmente el último dato de julio sobre empresas registradas a la Seguridad Social arroja un déficit de 16.163 empresas respecto a julio de 2019, y es que, como avisa Cepyme, la recuperación del número de empresas se está produciendo de forma positiva y constante desde el repunte de abril, pero el ritmo de creación de empresas se ha desacelerado en los últimos meses.
Se desacelera la creación de empresas: las pymes, las más castigadas
La patronal de las pymes ve un cambio de tendencia «preocupante», puesto que en junio se crearon 8.140 empresas, con un alza del 2,6%, inferior al 3,1% de mayo. Esa moderación se agudizó aún más en julio, con 5.478 nuevas unidades, un 2,3% más. No obstante, cabe recordar que el repunte de abril se debió en buena medida a la comparación con el mismo mes de 2020, cuando España estaba en pleno confinamiento y el tejido empresarial paralizado casi por completo.
El análisis sobre la pérdida de 44.640 empresas en los siete primeros meses del año respecto al mismo período de 2019, aproximadamente un 3,3% menos, muestra que las empresas más castigadas por la crisis del coronavirus siguen siendo las pymes, especialmente las microempresas. De hecho, aproximadamente el 80% de la caída registrada en el número de empresas en el período tenían menos de 10 trabajadores (36.100 empresas).
En el segundo trimestre se ha producido una tenue recuperación de los niveles en el conjunto de las pymes, muy acompasada con el tramo comprendido entre las de 1 a 9 trabajadores y tan sólo se observa un cierto deterioro en el ámbito de las medianas empresas.
La gran empresa recupera los niveles precrsisis
No obstante, sigue manteniéndose una considerable brecha entre los niveles registrados entre las pymes y las grandes empresas, alcanzando estas últimas los niveles precrisis, mientras que las empresas de menor dimensión siguen estando aún unos 1,2 puntos porcentuales por debajo de dicho nivel. Entre estas destacan las medianas empresas, con un 1,9% menos.
En lo que va de año el número de microempresas ha descendido un 3,1% respecto al mismo periodo de 2019 con 36.135 empresas menos; las pequeñas empresas han caído un 4,8%, con 7.536 empresas de pérdida; y las medianas un 3,8%, con 974 menos, mientras que las grandes han aumentado, con seis empresas más.
Según Cepyme, la recuperación de este tejido empresarial será muy costosa y requerirá un esfuerzo adicional en apoyos y ayudas para evitar que esta destrucción de empresas se acentúe a medida que se prolonga la crisis.
El sector servicios, el más castigado
Además de la mayor incidencia en las empresas de menor tamaño, la crisis también ha provocado una mayor afectación en determinadas ramas de actividad, sobre todo en el sector servicios, el más castigado, con 44.357 compañías menos que en los siete primeros meses de 2019, un 4,4% menos.
El siguiente sector más dañado ha sido el de la industria, con una pérdida de 3.399 compañías (-3,1%), mientras que el número de compañías en la construcción ha subido en 2.286 sociedades (+1,7%), así como en la agricultura, con 832 más (+0,9%).
Las restricciones asociadas con determinadas actividades de la hostelería y la restauración, así como una menor demanda asociada a las limitaciones de movilidad en el ámbito internacional están detrás de este comportamiento. El mayor crecimiento interanual de empresas en junio se está registrando en la construcción (5% en julio), mientras que las actividades industriales (0,1%) y los servicios (1%) mantienen una evolución más discreta.
De cualquier forma, las ramas de actividad más castigadas durante la pandemia han sido la hostelería, el comercio, la distribución comercial y el transporte y almacenamiento.
La hostelería cuenta aún con 16.054 empresas menos que antes de la pandemia, un 8,9% menos que en los siete primeros meses de 2019; el comercio aún tiene 12.297 empresas menos que antes de la crisis (-4%) y el transporte cuenta con 5.553 compañías menos que hace dos años (-8,2%).