Precio del gas y uso de renovables: las claves del ‘ibex energético’ para elevar sus cuentas
Las grandes empresas energéticas españolas esperan unos buenos resultados del primer semestre de 2023, aunque para mantener una tendencia positiva deben darse algunos condicionantes concretos
Una vez que haya pasado la resaca electoral, el ámbito empresarial retoma el pulso de la actualidad. Así, en la semana del 24 al 28 de julio las empresas del Ibex 35 presentan sus resultados financieros pertenecientes al primer semestre de 2023. En el sector energético se esperan buenos números, aunque existen muchos condicionantes para que la progresión se mantenga.
La primera en encender los petardos será Naturgy (lunes, 24 de julio). La gasista presidida por Francisco Reynés ha tenido un segundo trimestre accidentado, y no precisamente a nivel energético. Y es que, con la mar de fondo del ‘Proyecto Géminis’ y la segregación de los activos, la compañía finalmente ha buscado la figura de consejero delegado. Aunque después de idas y vueltas, el proceso ha quedado en en limbo. Igual que la división de la empresa.
Por lo que respecta a las magnitudes económicas, el consenso de analistas recopilado por Bloomberg estima que la facturación se mantendrá plana, en torno a los 16.700 M€, y el beneficio repuntará por encima de los 800 M€. La clave, según estiman los analistas, se encuentra en la buena marcha del negocio de redes en Latinoamérica, así como el desempeño del negocio de generación térmica en mercados con el español.
Por lo que respecta al gas, la evolución de su precio será determinante para la segunda mitad del año. Asimismo, cabe recordar que Naturgy sigue sin tener cerrado el precio del actual trienio para la importación de gas natural de Argelia. Esta cuestión, junto con las dudas corporativas afectarán más a los mercados que a la caja de la compañía.
El futuro renovable
La siguiente gran parada será el miércoles, 26 de julio. Ese día Endesa rinde cuentas ante el mercado, y como le sucede a Naturgy, el primer semestre ha estado marcado por los movimientos corporativos. En este caso, los cambios de dirección en su dueña, Enel, han generado cierta inquietud en torno a la figura del consejero delegado, José Bogas. Aunque la eléctrica azul siempre ha sostenido que no hay motivos para pensar en potenciales cambios, en los despachos a veces se hacen otras lecturas.
Por lo que respecta a la cifras financieras, el consenso recopilado por Bloomberg ofrece una ligera caída tanto en ingresos (13.400 M€) como en beneficio (850 M€) para el primer semestre de 2023. Los analistas destacan la importante necesidad que ha tenido Endesa de acudir al mercado mayorista, con precios todavía elevados; y el mayor coste de la deuda que debe afrontar, y que eso golpea al beneficio.
En cuanto a la perspectiva para lo que resta de año, será importante, precisamente, cómo se comporta el mercado eléctrico, y cómo es el aporte a nivel de generación por parte de Endesa, cuánto necesita comprar; el uso que se hará de los ciclos combinados de gas… asimismo, la pelea comercial en la captación de clientes será esencial.
Y ese mismo día, los gestores técnicos del sistema, Redeia (Red Eléctrica) y Enagás, también rendirán cuentas ante el mercado.
Por lo que respecta a la compañía presidida por Beatriz Corredor -de momento-, habrá estabilidad en sus ingresos, debido a su condición de empresa regulada, y para la segunda mitad del año habrá potenciales cambios en la dirección, dependiendo de lo que haya sucedido el 23J. En este sentido, el acople del ‘boom’ renovable es la gran tarea pendiente, aunque el gran pelotón llegará en 2025.
En cuanto al TSO del gas, su vista sigue puesta en la publicación de la directiva europea sobre el transporte del hidrógeno (previsiblemente en diciembre) y la lista definitiva de los proyectos de interés común en enero de 2024. Así que en este semestre, y también por su carácter de compañía regulada, no se esperan muchos sobresaltos.
Los dos grandes
El jueves, 27 de julio, comparecen ante el mercado la gran eléctrica y petrolera españolas. Iberdrola y Repsol. Ambos con buenos resultados, tal y como pronostican los consensos, y con una perspectiva también positiva para lo que resta de año.
La compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán, según los analistas, elevará ingresos y beneficios con respecto al primer semestre de 2022, además se espera que sea de forma considerable. Las claves para este despegue habrán sido, por ejemplo en suelo español, un gran inicio de año del segmento comercial. De igual manera, a nivel de grupo, la producción de energía se ha convertido en un recurrente para Iberdrola.
Sobre lo que tendrá que atar hasta final de año, todo está en Estados Unidos. Donde en los últimos meses ha empezado a tener más problemas de los previstos.
Y ese mismo día rinde cuentas ante el mercado Repsol. Para la energética presidida por Josu Jon Imaz los analistas también esperan un repunte positivo. En su caso, el desempeño comercial en España ha sido importante, aunque su negocio de refino siempre es el que genera mayor incertidumbre.
La previsible contracción económica pesará sobre el precio del crudo en próximos trimestres que tendrá como soporte las decisiones de los grandes productores y su adaptación de oferta. La previsión para 2023 ronda un crudo en torno a 70$ y para 2024 65$. Si se mantiene sobre esos niveles será positivo para Repsol, mientras que si las presiones a la baja en el precio ganan terreno, el grupo tendrá que revisar objetivos.
Asimismo, Repsol se ve muy expuesta a los precios mayoristas en el ámbito eléctrico. Sobre todo, porque son compradores netos de energía y su cartera de clientes no deja de crecer. Así, para mantenerse competitivos deben apurar los márgenes, y eso termina pasando factura.