Hipotecas: es posible comprar una casa del banco con piscina por menos de 50.000
Comprar una casa propiedad de una entidad financiera presenta distintas ventajas, como una mayor financiación y flexibilidad en los plazos de compra
Si estás pensando en comprar una casa, quizás adquirir una vivienda propiedad de una entidad financiera pueda resultarte una buena opción. Se trata de casas y pisos que han formado parte de un proceso de ejecución hipotecario, es decir, que han pasado a pertenecer a un banco tras el impago de un préstamo hipotecario.
A pesar de el precio de estas viviendas varía en función de múltiples factores, desde la población y la zona en la que están ubicadas hasta las características del inmueble, es posible encontrar propiedades de este tipo con un precio inferior a los 50.000 euros.
Por ejemplo, en la localidad almeriense de Zurgena hay a la venta una chalet con un precio de 48.500 euros, con una superficie de 77 metros cuadrados y dos habitaciones, según el portal Idealista. En Torrevieja, en Alicante, también hay a la venta un estudio por 49.600 euros, con garaje incluido, y un piso por 49.600 euros.
Por menos de 50.000 euros, también destaca un piso ubicado en la población de Ricla, en Zaragoza. El inmueble, valorado en 49.000 euros, dispone de dos habitaciones y una superficie de 62 metros cuadrados.
Con un precio de 50.000 euros, hay a la venta un piso en la localidad murciana de Sucina, con dos habitaciones y una superficie de 73 metros cuadrados, y también, otro en el municipio almeriense de Garrucha, con una habitación y 48 metros cuadrados.
¿Cuáles son las ventajas de comprar una vivienda propiedad de un banco?
A pesar de que, en general, el precio de las viviendas está siguiendo una tendencia de crecimiento, en el caso de las casas y pisos que pertenecen a los bancos el importe económico a pagar para adquirirlos suele ser más reducido.
Para adquirir este tipo de inmuebles, los bancos suelen ofrecer posibilidades de financiación más atractivas. Por ejemplos, son las únicas propiedades con las cuales se puede obtener una financiación completa, es decir, por la totalidad del valor de la propiedad.
En este sentido, las entidades financieras también acostumbran a ser más flexibles respecto de los plazos de compra de estas viviendas. Así, el plazo de amortización de la hipoteca puede llegar a prolongarse hasta los 40 años.
Por tanto, la cuota mensual a desembolsar es menor, lo que contribuye a que se pueda hacer frente a los pagos a pesar de las situaciones imprevistas que puedan surgir durante los años que se devuelva el préstamo a la entidad bancaria.
Asimismo, conviene tener en cuenta que la compra de inmuebles de bancos no generan ningún tipo de comisión.
Otra ventaja es la tasación de la vivienda. Mientras que cuando se adquiere una vivienda propiedad de una persona es necesario llevar a cabo la tasación del inmueble, en el caso de la compra de casas y pisos de bancos el trámite le corresponde a la entidad financiera.