La hipoteca media de España se encarece un 43% en doce meses, hasta los 3.000 euros anuales

El encarecimiento de las hipotecas en España se ha convertido en una de las tónicas generales devenidas de las subidas de tipos de interés llevadas a cabo por el Banco Central Europeo, además de por la escalada del Euríbor.

La elevada inflación vista durante el anterior curso, especialmente en la temporada estival, obligó a la institución presidida por Christine Lagarde a alzar los tipos de interés el pasado julio, siendo esta la primera variación monetaria que el BCE llevaba a cabo desde marzo de 2016.  

El BCE elevó los tipos de interés un 0,25% el pasado 4 de mayo

A la primera subida de tipos de interés le han sucedido otras seis, las cuales han ubicado las tasas sobre el 3,75%, el nivel más elevado desde octubre de 2008. En esas, el Euríbor, indicador de referencia para la banca española a la hora de cifrar los tipos de interés de las hipotecas, ha emergido a un ritmo récord, superando la barrera del 3,84% y con proyecciones que apuntan a que el índice va a superar el 4% más pronto que tarde.  

De esta forma, la coyuntura económica actual ha sumido en una espiral de continuos sobrecostes a las hipotecas de toda Europa, entre las que se encuentran las de España. El endurecimiento monetario ejercido por el BCE, unido a la escalada del Euríbor, ha encarecido el crédito bancario, haciéndolo menos accesible para los consumidores, lo que, a la postre, está evidenciando una caída de la demanda hipotecaria que, según los bancos, será aún mayor en el segundo trimestre.  

La cuota de la hipoteca media en España vale 250 euros más que hace un año 

Por lo pronto, el entorno financiero ha elevado el precio de la mensualidad de la hipoteca media en España en 2022 en un 43%. Tal y como informó el Instituto Nacional de Estadística (INE) a finales del anterior ejercicio, el préstamo medio solicitado por los consumidores españoles para una vivienda fue de 145.510 euros a 24 años, con un tipo diferencial del 1% sobre el Euríbor para las hipotecas de tipo variable.  

Suponiendo que el consumidor tenga pactado con su banco la revisión de la hipoteca en mayo, la cuota crecería desde los 587,55 euros que valía en mayo de 2022, hasta los 843,65 euros que valdría actualmente. 

Pese a que todas las hipotecas se han encarecido en los últimos 12 meses, las de tipo variable son las más ‘damnificadas’ por el efecto al alza de los tipos de interés y, al mismo tiempo, las que esclarecen con mayor vehemencia la actual coyuntura económica.  

En mayo de 2022, el Euríbor comenzaba a emerger con fuerza después de que, hasta finales de 2021, este indicador estuviera en negativo. Tal y como exponen los expertos, los notables incrementos del índice de referencia para la banca eran, y son, un reflejo de las próximas subidas de tipos de interés del Banco Central Europeo.

En esas, y un par de meses antes de que el organismo liderado por Lagarde comenzará a endurecer la política monetaria, el Euríbor pasó desde el 0,287% que mantenía al cierre de mayo hasta el 0,992% de julio, mes en el que la institución monetaria instauró una política monetaria restrictiva.  

La hipoteca media española se encarece un 33% desde las subidas de tipos  

Doce meses más tarde, el índice de referencia para fijar los tipos de los préstamos hipotecarios se ha asentado por encima del 3,84% que maneja actualmente, llevando las hipotecas, especialmente, las de tipo variable, a encarecerse a un ritmo vertiginoso. En un año, el crédito hipotecario se ha encarecido un 43%, mientras que una hipoteca media se ha encarecido más de un 33% desde julio, mes en el que el BCE comenzó a elevar los tipos.  

Utilizando los datos de la hipoteca media en España en 2022, la mensualidad en mayo del anterior curso era de 587,55 euros, mientras que, en la actualidad, una hipoteca con las mismas características tiene ahora una cuota mensual de 843,65 euros. Es decir, la mensualidad se ha encarecido en más de 256 euros, lo que al año supone un incremento de más de 3.070 euros.  

Tras siete subidas de tipos de interés del BCE consecutivas y un Euríbor en máximos de octubre-noviembre de 2008, el panorama refleja un sobrecoste del 43% para la hipoteca media de España en 2022 en cuestión de doce meses, y una caída de la demanda del crédito bancario que ya comienza a manifestarse.  

Las hipotecas a tijo fijo siguen ganando terreno  

Otro de los efectos directos que ha dejado los incrementos del Euríbor, como de las tasas de interés, es la reversión de la tendencia de las hipotecas variables a las fijas. Pese a que las segundas, por su estabilidad, han sido la opción preferida por los españoles, el Euríbor en negativo inclinó la preferencia del consumidor hacia las hipotecas de tipo variable.  

En febrero, el 65% de las hipotecas firmadas eran a tipo fijo

Hasta diciembre de 2020, con el Euríbor en –0,497%, el 52% de las hipotecas concedidas en España eran a tipo variable. Actualmente, el 65% de las hipotecas firmada son a tasa fija. Cabe destacar que, en medio de ese cambio de tendencia, ha emergido la presencia de las hipotecas mixtas, en las cuales, los bancos vienen informando de varias peticiones por parte de los consumidores de hipotecas variables a fijas.  

Sea como fuere, el Banco de España alerta de que lo que está por venir es una caída de la demanda de préstamos para vivienda en el segundo trimestre. En una línea similar, el consejero delegado de Caixabank, Gonzalo Gortázar, advirtió en la rueda de prensa de los resultados trimestrales del banco que los analistas de Caixabank proyectan una retrotracción del crédito para vivienda de hasta un 25% para el segundo tramo de 2023.  

Por su parte, Banco Santander afirma a Economía Digital que la coyuntura económica hará que la demanda de crédito baje, asegurando que es una tendencia que “ya está en marcha”. Las subidas de tipos de interés, además del progresivo crecimiento del Euríbor, ha hecho que las condiciones de los préstamos bancarios sean más restrictivas, lo que se traduce en una caída de la demanda que las entidades bancarias ya están apreciando.  

Todas las estimaciones proyectan una subida del Euríbor hasta el 4% en las próximas semanas. De cumplirse las previsiones, las revisiones de las hipotecas variables que se hayan hecho este mes, así como las de junio y julio, harán que los consumidores tengan que afrontar un sobrecoste superior a 250 al mes, lo que al año se traduce en un encarecimiento de más de 3.070 euros.