Hacienda ingresará 2.200 millones este año gracias al encarecimiento de la luz
Las arcas del Estado doblarán sus ingresos energéticos debido al encarecimiento del CO2 que ha disparado la factura de la luz
El precio de la luz es una de las grandes preocupaciones de los españoles, después de que el mercado eléctrico se disparara en mayo, alcanzando su nivel más alto de los últimos 32 meses. Paradójicamente esta elevación de la factura no significa un palo para las arcas públicas, sino todo lo contrario. Hacienda ingresará este año más de 2.200 millones de euros gracias a los impuestos y las subastas públicas, lo que supone cerca del doble que el curso anterior.
El encarecimiento del coste del CO2 supondrá un ingreso adicional para las cuentas del Estado. Su precio en el mercado se ha multiplicado en un año desde los 19 euros por tonelada hasta los 52, lo que ha desencadenado un incremento de la factura de la luz. Sin embargo, la recaudación por impuestos como el IVA o el beneficio de las subastas de derechos de emisión de CO2 que España coordina con Europa están detrás de esta notable mejora en los ingresos, según ha publicado El Mundo.
Esta paradójica situación ha llevado al sector eléctrico a solicitar al Gobierno de Pedro Sánchez que invierta una parte de este excedente de la recaudación para facilitar que tanto hogares como empresas puedan financiar los costes regulados del sistema eléctrico con el objetivo de reducir el recibo final de la luz.
Las grandes empresas quieren compensar de esta forma el golpe económico que calculan que sufrirán con los planes del Ministerio de Transición Ecológica de recortar los ingresos que producen tanto las centrales nucleares como las hidroeléctricas en España para abaratar la factura de la luz. Estiman que este ajuste tendrá un impacto de unos 1.000 millones de euros, prácticamente el mismo beneficio extraordinario que logrará Hacienda en 2021.
El Gobierno se enfrenta al sector eléctrico y a los consumidores
Los nuevos cambios preparados por el Gobierno de Pedro Sánchez han creado malestar entre las compañías del sector eléctrico pero tampoco han terminado de convencer a los ciudadanos. Tanto la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) como Facua han mostrado su rechazo con el nuevo sistema para calcular la factura eléctrica de los hogares, que ha establecido tramos horarios diferenciados con diferente tarificación.
La opción de situar las franjas horarias más económicas en la madrugada y el fin de semana no ha sido bien recibida por las organizaciones que temen que acabe perjudicando a las familias más vulnerables. «No se puede hacer responsable al consumidor de que su factura de la luz es cara porque no ha planchado o puesto las lavadoras, lavavajillas y secadoras en los horarios más económicos», ha advertido Facua.
Las personas que teletrabajan y están obligadas a permanecer durante su jornada laboral en casa son otros de los grandes perjudicados porque se verán obligados a incrementar su consumo en los horarios de mayor carga económica. Lo mismo ocurre con los que no dispongan de hogares adaptados a nivel de eficiencia energética o que, por ejemplo, no tengan la posibilidad de programar su sistema de calefacción.