Hacienda hace el agosto con la gasolina: recauda 30 millones más al día con la subida de precios
La situación es contradictoria para el Ejecutivo de Pedro Sánchez, puesto que una rebaja de impuestos supondría un mazazo para las arcas públicas
La invasión de Ucrania por parte del ejército ruso ha provocado una crisis energética en toda Europa. Junto a los precios de la electricidad, todo el negocio relacionado con el petróleo también está sufriendo fuertes incrementos de precios. En concreto, los precios de la gasolina se han disparado. El consumidor está pagando de media entre 10 y 20 céntimos más por litro que hace unas semanas. Ante este escenario, el Gobierno no toma medidas y, de momento, mantiene los impuestos. Una situación que beneficia a las arcas públicas en detrimento de la ciudadanía.
Ante este escenario, el Ministerio de Hacienda estaría recaudando de media hasta 30 millones de euros más al día en comparación con 2019, último año de consumo similar a 2022, sin contar con los años de la pandemia que han sido raros en cuanto al consumo energético y la actividad económica.
Hace tres años, los precios medios de la Sin Plomo 95 y el Gasóleo, estaban en 1,29 €/litro y 1,21 €/litros, respectivamente. Aplicando el mismo IVA del 21% que por el momento el Ejecutivo se niega a tocar, pese a que las patronales sectoriales así lo aconsejan, con los precios medios actuales de esta semana, que son 1,81 €/litro para la gasolina 95; y 1,76 €/litro para el diesel, el resultado es esa recaudación de más que está haciendo el Estado vía impuestos.
La situación es contradictoria para el Ejecutivo de Pedro Sánchez, puesto que una rebaja de impuestos supondría un mazazo para las arcas públicas. De lo contrario, es el bolsillo de los españolas quien sufre este alza de precios que, además, parece que se prolongará en el tiempo, sobre todo porque los precios del petróleo por el momento también están en aumento debido a las tensiones geopolíticas que ha despertado la invasión de Ucrania.
Una situación que ya se nota
Por lo que respecta al negocio privado, esta situación ya se ha dejado notar. En España, las dos marcas de referencia, Repsol y Cepsa, han notado que los clientes habituales han empezado a elegir otros lugares de repostaje ante el alza de los precios.
Desde hace días se asumía que el precio de la gasolina, en el caso de su variante Sin Plomo 98, sobrepasaría los 2€. Finalmente eso ha ocurrido durante este fin de semana. Y ahora, en la mayoría de estaciones de servicio pertenecientes a Repsol y Cepsa, el precio medio este lunes era de 1,853 €/litro y 1,759 €/litro, respectivamente. Entre los grandes del sector, Galp está vendiendo de media su gasolina 98 a 1,823 €/litro; mientras que Shell y BP están de igual modo en esos márgenes.
Cabe recordar que este tipo de combustible, caso de la Sin Plomo 98, tuvo un precio medio en España de 1,480 €/litro en 2021. En este contexto, llenar un depósito de 40 litros el pasado año tendría un coste medio de 59 euros, mientras que hacerlo este lunes supondría un desembolso de 74 euros. Al menos si se hace en una de las estaciones de servicio de Repsol, que según diversas webs de comparación de precios que ha consultado ECONOMÍA DIGITAL, es la marca que ahora mismo tiene las tarifas más altas. Algo que también ocurre para el diésel.
Ante escenario, que afecta a todos los tipos de combustible por igual, los clientes han empezado a plantearse en serio otras alternativas para llenar el depósito de sus coches. Pero esta vez de forma efectiva. Desde hace años hay diversas opciones en el mercado, tanto las gasolineras ‘low cost’, como las estaciones de servicio automáticas, cuyos precios también están muy ajustados. Así, lo que hace años era una opción que generaba ciertos recelos, ante esa escalada de precios que por ahora no prevé su fin, los usuarios ya han tomado partido.
Ballenoil representa un claro ejemplo. Durante estos días ha tenido su tope de ventas en una sola jornada. Una situación que ha coincidido con el inicio de la invasión en Ucrania y el alza de los precios de la gasolina que, además, son el reflejo inmediato de los costes del petróleo que más adelante volverán a indexar dicho alza una vez se ejecuten las compras sobre precios actuales.