Goirigolzarri exculpa a Rato
El presidente de Bankia defiende la gestión de su antecesor, aunque el Estado tendrá que inyectar 23.500 millones. Los planes de fusión con CatalunyaCaixa y NovaGalicia Banc aún no están encima de la mesa
El día después de que Bankia haya pedido al Estado hasta 19.000 millones más, que se inyectarán con dos ampliaciones de capital, su presidente, José Ignacio Goirigolzarri (Goiri), ha comparecido ante la prensa para explicar qué van a hacer con este rescate multimillonario. Sin embargo, ha sido inevitable referirse a su antecesor, Rodrigo Rato.
En Bankia no se va a mirar hacia atrás y piden “precaución” con los juicios de valor. “No he venido aquí para depurar responsabilidades, sino para garantizar el futuro de una franquicia sólida, rentable y libre (este último calificativo creó intensos murmullos en la sala)». “La gestión (de Rato) se produjo en un entorno económico muy complicado y en un marco regulatorio cambiante”.
“No debemos equivocarnos, lo único que ha pasado en Bankia es que sus activos se han deteriorado”. El ejercicio de pasar página quedaba completo dando las gracias al antiguo consejo de administración, que dimitió en pleno. Para ellos tampoco hay reproches aunque bajo su mandato se ha producido la mayor nacionalización financiera de España. De momento no habrá investigación interna.
En las entrañas de Bankia lo que sí ha habido ha sido una reformulación de las cuentas y una revisión de activos, créditos dudosos y empresas participadas. Se ha incrementado la cobertura y se ha estresado la cartera completa con los requerimientos que Bruselas aplicó a la gran banca europea hace un año, según José Sevilla, la mano derecha de Goiri.
Dicho en números: 15.400 millones de agujero en créditos y ladrillo y 1.900 millones más por la puesta en valor real de la cartera industrial. Total, 17.300 millones de necesidades brutas que tras restar el efecto fiscal y 2.000 millones disponibles en recursos del propio banco dan los 12.000 pedidos para Bankia, que su matriz inyectará cuando reciba los 19.000 del fondo de rescate Frob. «Es capital, no una ayuda a fondo perdido», ha dicho el presidente de Bankia.
Reformulación
Los activos inmobiliarios se han adecuado a su precio de mercado. Se trata de un ejercicio que ha hecho aflorar todas las necesidades de una tajada, según el banco, y que garantiza que el Estado tenga que aportar los recursos ya anunciados. “Ni uno más”, dice Goiri.
La reformulación se ha hecho “con criterios profesionales”, ha repetido el presidente de Bankia hasta en seis ocasiones. El trabajo ha sido tan minucioso que en las torres Kios están convencidos de que los auditores del Gobierno, Berger y Wyman no encontrarán salvedades.
Fusión
La fusión de Bankia con CatalunyaCaixa y Novagalicia Banc no está encima de la mesa. “Pero no soy yo quien lo tiene que plantear, me debo a Bankia y confío en su futuro si no, no estaría”. Varios analistas sospechan que este será el siguiente paso del ministro Luis de Guindos, que ha atrasado la subasta de la caja catalana.
El futuro inmediato de Bankia pasa por su junta de accionistas que se celebrará el próximo 29 de junio en Valencia. Antes se habrán presentado los resultados del primer trimestre, el año lo cerró perdiendo 2.974 millones, y se habrá buscado una solución para las emisiones de preferentes y suscriptores de deuda subordinada. “De momento sólo sabemos que no las incorporaremos como capital”.
Polémica en bolsa
El encuentro con los accionistas se prevé convulso también por la parsimonia de la entidad en el momento de pedir la suspensión de la cotización. Varios inversores no entienden cómo se ha dejado caer al banco hasta un 30%. El presidente de Bankia ha sido contundente. La suspensión se solicita “cuando hay información contradictoria o confusa” hecho que a juicio de Goiri sólo pasó este viernes.