El Gobierno salva a la Seguridad Social de la quiebra con 43.300 millones
Los Presupuestos de 2022 recogen una nueva transferencia récord del Estado a la Seguridad Social de 36.276 millones, un 16,4% más, y un nuevo préstamo de 6.982 millones para poder pagar las pensiones y equilibrar las cuentas
Un año más el Gobierno ha acudido al rescate de las pensiones con una inyección histórica de cerca de 43.300 millones de euros a la Seguridad Social para poder hacer frente a los pagos comprometidos y tratar de equilibrar las cuentas de un sistema en ‘números rojos’ y con deuda récord.
Así se desprende del proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2022 presentado y entregado este miércoles por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en el Congreso, que refleja una nueva transferencia récord del Estado a la Seguridad Social y un nuevo préstamo, totalizando en conjunto 43.258 millones de euros.
En concreto, la Seguridad Social recibirá el próximo año una transferencia récord de 36.276 millones de euros de parte del Estado, lo que supone un incremento del 16,4% respecto a la de este año.
A pesar de esta transferencia récord, se contempla un nuevo préstamo del Estado a la Seguridad Social de 6.982 millones para equilibrar las cuenta de la Seguridad Social, lo que supone casi la mitad que el presupuestado de 13.929 millones en 2021. No obstante, elevará aun más la actual deuda del sistema de unos 92.000 millones.
De esta forma, el Estado vuelve a garantizar el pago de las pensiones y ‘rescata’ a la Seguridad Social ante sus ‘números rojos’ garantizando sus sostenibilidad y evitando su quiebra, algo que técnicamente es prácticamente imposible al contar con cotizaciones a largo plazo y estar asegurado por el paragüas del Estado.
El gasto en pensiones sube en 8.000 millones, hasta 171.000 millones
La Seguridad Social tendrá que hacer frente a un nuevo récord histórico del gasto en pensiones en 2022 de 171.165 millones de euros, un 4,8% más que este año, al sumar 7.868 millones, a pesar de la batería de medidas aprobadas para asegurar la sostenibilidad del sistema y de las incluidas en la primera parte de la reforma de pensiones del Gobierno.
Este mayor coste obedece a la revalorización de las pensiones con arreglo al IPC, fijada en la primera parte de la reforma de las pensiones al establecer una subida del IPC medio de los últimos doce meses registrado en noviembre del año anterior, lo que augura un aumento de en torno al 2,3% en 2022.
Esto supone también que el Ejecutivo tendrá que proceder al abono de 1,5 puntos de compensación (unos 2.300 millones) por la diferencia con la subida de las pensiones del 0,9% aprobada para 2021, en aras de evitar una pérdida de poder adquisitivo. La denominada ‘paguilla’ se abonará en «diciembre o enero», según ha apuntado Montero, precisando que, en cualquier caso, no computará en el déficit del próximo año sino en el de este.
También cabe recordar que las pensiones mínimas y no contributivas para 2,6 millones de pensionistas subirán un 3%. Y en el aumento del gasto en pensiones se contemplan los cerca de 8.000 millones del gasto en pensiones de clases pasivas.
Para este colectivo, formado por el personal militar y a funcionarios de la Administración General del Estado, de la Administración de Justicia, de las Cortes Generales y de otros órganos constitucionales o estatales, así como a los funcionarios transferidos a las comunidades autónomas, también se contempla una revalorización con el IPC.
Casi 10.000 millones para pensiones mínimas y no contributivas
Dentro de las aportaciones del Estado destacan las transferencias que se realizarán en cumplimiento de la recomendación primera del Pacto de Toledo sobre la separación de fuentes de financiación de la Seguridad Social, con un total de 18.396 millones de euros, 4.467 millones de euros más que en el presupuesto de 2021, para garantizar la sostenibilidad del sistema a medio y largo plazo.
Del total de transferencias, 2.880 millones de euros se destinarán a financiar la prestación contributiva de nacimiento y cuidado de menor (+3,4%); 1.690 millones de euros a reducciones en la cotizaciones a la Seguridad Social (-5%); 5.085 millones de euros a la financiación de otros conceptos (-45,7%), y 3.022 millones de euros a financiar el Ingreso Mínimo Vital (+0,2%).
El Estado también transferirá 7.075 millones a la Seguridad Social para la cobertura de los complementos a pensiones mínimas, la misma difra que este año, en tanto que la aportación para financiar las pensiones no contributivas está dotada con 2.772 millones de euros (incluido País Vasco y Navarra), un 0,8% más que en 2021. Entre ambas totaliza una transferencia de 9.847 millones.
De su lado, para la protección familiar se destinarán 1.414 millones de euros, lo mismo que en 2021, y para la atención a la dependencia, 2.146 millones de euros.
Un menor préstamo ante el aumento de ingresos: un 9% más de cotizaciones
Respecto al nuevo préstamo de 6.982 millones, la mitad que en 2021, los PGE detallan que se produce por el aumento estructural de las transferencias del Estado derivado de la separación de fuentes de financiación y por la positiva evolución prevista de los ingresos por cotizaciones sociales en 2022.
Concretamente, la Seguridad Social estima que ingresará 136.345 millones de euros en cotizaciones sociales, un 9% más que en 2021, de lo que 127.224 millones de euros corresponden a cotizaciones de empresas y trabajadores ocupados (+9,7%); 8.755 millones de euros a cotizaciones de desempleados (-0,4%) y 366 millones de euros a cotizaciones por cese de actividad de los autónomos (+12,9%).
El Gobierno achaca en el proyecto de PGE la mejora de ingresos por cotizaciones de empresas y trabajadores a la recuperación económica y del empleo y el descenso de los ingresos por cotizaciones de desempleados al elevado volumen de prestaciones reconocidas en 2021 por la crisis sanitaria y a la mejora del empleo.
La Seguridad Social aumenta un 5% su presupuesto
En total, la Seguridad Social contará en 2022 con un presupuesto de 181.081 millones de euros, incluyendo sus operaciones de carácter financiero, lo que supone un 5% más, debido a la revalorización de las pensiones de en torno al 2,3%, de las pensiones no contributivas y mínimas del 3%, en el mismo porcentaje el Ingreso Mínimo Vital y el alza de 27 a 28 euros del complemento de pensiones contributivas para reducir la brecha de género.
Los ingresos no financieros de la Seguridad Social aumentarán más de un 10%, hasta los 173.655 millones de euros, principalmente por las cotizaciones sociales (127.224millones, +9,7%), lo que permitirá financiar el 75,3% del Presupuesto, gracias al impulso del aumento de las bases máximas de cotización en un 1,7% y a las transferencias del Estado de 36.276 millones.
Del total de 136.345 millones de euros que augura que recaudará la Seguridad Social por cuotas, de las cotizaciones de empresas y trabajadores ocupados procederán 127.244 millones (+9,7%); por cuotas de desempleados 8.755 millones (-0,4%) y por cotizaciones por cese de actividad 366 millones (+12,9%).
Por regímenes, el General será el que aportará mayores ingresos por cuotas, con 105.843 millones de euros, seguido del RETA (11.397 millones de euros). En el Régimen del Mar, por su parte, se prevén recaudar 384 millones de euros; en el del Carbón, 68 millones, y por accidentes y enfermedades profesionales se ingresarán 9.531 millones de euros.
Déficit de 6.171 millones
A pesar de los 173.000 millones de ingresos, los gastos ascenderán a 179.826 millones de euros, un 4,6% más que que en 2021, por lo que la diferencia entre ingresos y gastos arrojan un déficit de 6.171 millones de euros.
La mayor parte del presupuesto de gastos se destinará a las pensiones contributivas, que contarán con una dotación de 149.996 millones (+4,9%), casi el 40% del gasto social presupuestado, y a las pensiones no contributivas se dedicarán 2.587 millones, sin contar País Vasco y Navarra.
Dentro del grupo de prestaciones contributivas , 108.723 millones de euros son para pensiones de jubilación, el 72,5%; seguidas por las pensiones de viudedad (25.242 millones, el 16,8% del total); incapacidad (13.547 millones, el 9%), orfandad (2.063 millones) y en favor de familiares (421 millones).
A su vez, se recoge un crédito de 10.818 millones (+8,3%) para el pago de los subsidios integrados en la prestación de incapacidad temporal integra para compensar las consecuencias económicas derivadas de la situación de baja laboral por enfermedad o accidente.