El Gobierno premiará con más ingresos a los beneficiarios del ingreso mínimo vital que mejoren su situación laboral

Seguridad Social descarta que la medida tenga un coste adicional, que se compensará a través de cotizaciones sociales.

El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, presenta el avance de afiliación del mes de mayo, este jueves en Madrid. EFE/ Fernando Alvarado

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El Gobierno quiere evitar que se produzca la trampa de la pobreza en el caso de los beneficiarios del ingreso mínimo vital (IMV). Es decir, busca que las personas que cobren esta prestación no rechacen ofertas de empleo por miedo a perderla. Por ello, y para incentivar que busquen trabajo y mejoren su situación económica y laboral, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha aprobado este martes el diseño del incentivo al empleo del IMV.

Este incentivo no es una nueva prestación, se trata de un complemento que empezarán a cobrar los beneficiarios del IMV a partir del próximo año. No será necesario solicitarlo, y es que ser perceptor del IMV es un requisito para optar a este incremento de los ingresos que ofrecerá el Estado.

Será el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) quien revise los expedientes de los beneficiarios y cuando se detecte un incremento de los ingresos derivados del trabajo se procederá a mejorar la cuantía que reciben, en función de la diferencia entre lo que cobraban cuando se les aprobó el IMV y lo que reciben en el último año.

Para llevar a cabo esta revisión, el INSS deberá tener los datos de la renta de los beneficiarios. Cabe recordar que presentar la declaración de la renta es también obligatorio para estas personas. Entonces, aunque el real decreto del diseño de este complemento entrará en vigor en enero, no será hasta el verano cuando se empiece a cobrar, ya que la campaña de la renta va de abril a julio.

La cuantía depende de más factores

Fuentes del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones explican que la cuantía del complemento no dependerá únicamente de las rentas del trabajo. La composición del hogar, el tipo de movimiento -si esa persona estaba ya o entra por primera vez al mercado laboral- y si hay niños en el hogar influirán en la cuantía final.

Las mismas fuentes aseguran que este complemento no tendrá ningún coste para el Estado puesto que lo que se añada a la prestación tendrá que ver con las cotizaciones sociales. Calculan que por cada euro del complemento, el Estado estará ingresando entre 1 y 3,5 euros en materia de cotizaciones a la Seguridad Social.

Sobre el número de beneficiarios, en la actualidad reciben el IMV más de 500.000 hogares, 1,4 millones de personas. De estos, el Ministerio cree que podrían percibir este incentivo al empleo una quinta parte, unos 100.000 hogares, unas 44.000 personas.

Ejemplos y cuantías

En el caso de las personas que vivan solas y que reciban el IMV cobrarán un euro más por cada euro que aumenten sus ingresos del trabajo hasta una cuantía máxima de 3.540 euros, lo que es el 60% de la renta garantizada: 5.899,6 euros. Es decir, si una persona no ha tenido ingresos, recibirá un IMV de 5.899,6 euros. Al año siguiente, si sus ingresos han aumentado en 1.000 euros, como la cuantía es inferior a los 3.540 euros, su renta garantizada no perderá esos 1.000 euros, es decir, recibirá del Estado 5.899,6 euros, además de su sueldo.

Si el incremento de sus ingresos es de 4.500 euros, recibirá hasta 3.540 más y después un 30% de la cantidad que va de los 3.540 hasta los 4.500 euros. Es decir, su complemento se calculará por tramos. De esta forma, cobraría 3.500 euros, más 288 euros (30% del segundo tramo) y la diferencia entre sus ingresos y la renta garantizada, 1.399 euros. En total, esta persona recibiría unos 5.227 euros, además de su sueldo. En total, 9.727,43.

En el tercer tramo, cuando los ingresos están próximos o por encima de la renta garantizada, esta podría multiplicarse hasta 1,7 veces en el caso de un hogar unipersonal con el complemento. Volviendo al mismo ejemplo, si el cambio en los ingresos es de 6.000 euros, esta persona dejaría de recibir el IMV si no hubiera este incentivo, porque está por encima de la renta garantizada, de 5.899,6 euros. En cambio, ahora, cobraría 4.147,1 euros por este complemento, además de su sueldo.

Los cálculos son complejos y varían en función de los factores comentados anteriormente, por ello, el Ministerio tiene un simulador en fase de pruebas que podrá en marcha en breve. La intención del departamento que dirige José Luis Escrivá es que los beneficiarios del IMV puedan tomar decisiones relativas a su situación laboral, conociendo cuál será el beneficio en materia de ingresos.

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