El Gobierno subirá el impuesto a los refrescos para frenar el déficit
El Gobierno propone aumentar las tasas a las bebidas azucaradas y los impuestos ambientales para evitar que el déficit crezca más allá del 3,1%
Si el déficit da señales de superar el 3,1% del PIB, el Gobierno de Mariano Rajoy tiene un plan B para frenar la escalada: se trata de recaudar 500 millones de euros mediante la subida de impuestos medioambientales y a las bebidas azucaradas, que le permitirán ingresar 300 y 200 millones, respectivamente.
El Gobierno planteó estas medidas a finales del año pasado pero finalmente no se desarrollaron en el marco de los Presupuestos Generales para este año. En el Programa de Estabilidad 2017-2020 se precisa que estos cambios fiscales se analizan en el marco de la reforma de la financiación territorial.
Con los impuestos a las bebidas y los medioambientales se espera recaudar 500 millones más
Este plan, aprobado el viernes en el Consejo de Ministros y que este sábado se ha remitido a Bruselas, también se refiere al conjunto de medidas de lucha contra el fraude incluidas en el proyecto presupuestario de diciembre. Entre ellas está la reducción a 1.000 euros del tope para pagos en efectivo, frente a los 2.500 euros actuales.
El objetivo del Gobierno es incluirlas en un proyecto de ley que previsiblemente se aprobará a lo largo de 2017, añade el documento que prevé 1.800 millones de euros en positivo por este paquete de medidas, entre las que está el suministro inmediato de información del IVA ya en vigor.
El Gobierno proyecta aumentar las inversiones públicas en 1.000 millones
En el apartado de gastos, se apunta a una ligera subida de la partida de inversiones públicas, que pasará de suponer el 1,9 % del PIB en 2016 al 2 % en 2017 y al 2,1 % en 2018, un porcentaje que se mantendría hasta 2020. Ese incremento de una décima del PIB implica un volumen extra de unos 1.000 millones de euros más para cada ejercicio, partiendo de los 21.529 millones con los que terminó 2016.
El gasto social en pensiones caerá el 0,8%
En el capítulo del gasto social, las proyecciones del Gobierno prevén una caída del gasto total en pensiones del 0,8 % en el periodo 2013-2060. En cuanto al porcentaje que supondrá este gasto sobre el PIB, este pasará del 25,4 % en 2013 al 25 % en 2020 y al 23,5 % en 2030.
Esta reducción, explican, se debe tanto a la revisión de las previsiones demográficas y macroeconómicas como a las reformas del sistema de pensiones emprendidas.
El Gobierno detalla que estas reformas han permitido ahorrar 1.000 millones en 2016 a los que se sumarán 1.148 millones este año y 1.200 millones en 2018. En total, el programa recoge que todas las medidas adoptadas y previstas supondrán 4.805 millones de ahorro en la parte de fiscalidad y de 4.542 en otras partidas del Estado, Empleo y Seguridad Social.