El Gobierno pelea en Bruselas un tope del gas de 40 €/MWh en una negociación muy tensa
La negociación de España por la 'excepción Ibérica' sigue totalmente abierta, y el tope del gas centra todas las miradas
El Gobierno de España pelea contrarreloj para que la ‘excepción Ibérica’ sea algo más que un nuevo eslogan en la legislatura de Pedro Sánchez. Los ejecutivos español y portugués enviaron a Bruselas un plan para poner coto a los precios del gas y que, de esta forma, no impacten en la casación del precios del ‘pool’. Así se consigue rebajar el coste del mercado mayorista. La propuesta inicial era de 30 €/MWh. La Comisión Europea estima que ese tope debería estar sobre los 70-80 €/MWh. El último punto se sitúa más o menos en la mitad.
En concreto, según ha podido saber ECONOMÍA DIGITAL en fuentes conocedoras de la situación, la negociación se encuentra en estos momentos en una horquilla de entre 50 y 60 €/MWh. Esta situación pondría -como máximo- los precios mayoristas de la electricidad por encima de los 150 €/MWh, eso sin descontar que podría haber días más bajos, como ha pasado en las últimas fechas.
Por este motivo, el equipo de la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, se ha marcado como nuevo reto la cifra de los 40 €/MWh, sabiendo que la propuesta inicial de los 30 €/MWh es algo imposible, y por lo que Bruselas no aceptará bajo ningún contexto. Lo bueno para el Ejecutivo español, según las fuentes consultadas, es que la negociación está plenamente abierta en estos momentos. De hecho, está tan abierta que faltan demasiados flecos por cerrar.
Sobre ese eje temporal se sitúa otro de los frentes de debate del Gobierno. Las medidas que se aprobaron en la Cumbre Europea de finales de marzo tenían un carácter temporal. Hasta el 30 de junio, en concreto. Algo que no serviría de nada. Por eso, parte de la negociación también se basa en que esta medida se prolongue en el tiempo, al menos lo suficiente para que su efecto se haga notar en la economía, sobre todo de cara a las empresas. Éstas fueron las grandes perjudicadas hace dos meses por las graves subidas del mercado mayorista tras la invasión de Ucrania por parte del ejército ruso.
En mayo llega la clave
En cuanto a los plazos previstos para el anuncio oficial, Teresa Ribera ha destacado que están trabajando para que «a principios de mayo» pueda estar «aprobado y aplicado ya» el acuerdo alcanzado por los Gobiernos español y portugués en el seno del Consejo Europeo para que haya una ‘excepción ibérica’ al precio de la energía.
Lo más curioso en esta situación es que durante algunos días en estas semanas el precio ha bajado. Algo que era previsible, por las fechas que son con menor consumo eléctrico, pero que puede hacer replantear la situación en Bruselas si se termina viendo que el problema de precios no es tan grave una vez que desaparecen ciertas tenciones del mercado.
Sea como sea, la respuesta urge para el Gobierno español. «Nuestra intención, nuestra expectativa, nuestra convicción es que, porque además así lo entiende también la Comisión Europea, a principios de mayo podamos tener esto aprobado y aplicado ya en nuestro país y en Portugal», ha expresado la vicepresidenta.
Así, ha asegurado que están «trabajando» con la Comisión Europea ya que «hay algunos aspecto técnicos que todavía no están resueltos» y, además, ha matizado que el hecho de que «haya coincidido» con los festivos de Semana Santa ha provocado «no poder apurar los días» tal y como hubieran «deseado».
Del mismo modo, preguntada por si espera que Bruselas acepte las condiciones de España y Portugal, Ribera ha apuntado que los miembros de la Comisión Europea quieren «estar seguros de que la propuesta sea lo mejor, lo más robusta posible».