Funcas advierte de unos Presupuestos ajenos al alto déficit y con ingresos “optimistas”
Funcas cree que los Presupuestos de 2022 incluyen una recaudación algo sobrestimada y envían la "señal contraria" a la corrección del alto déficit y la elevada deuda, por lo que pide un plan "creíble" de consolidación fiscal
Los Presupuestos Generales del Estado (PGE) del próximo año inician este miércoles su tramitación parlamentaria con un gasto récord y una previsión también de la mayor recaudación tributaria de la historia, los dos principales aspectos que están analizando en mayor detalle los organismos e instituciones económicas para determinar si las cuentas cuadran.
La Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) ve en un primer análisis sobre los Presupuestos unos ingresos «un poco estimados» y un mensaje «en la dirección contraria» a la corrección del alto déficit y la elevada deuda pública que presenta España.
Así lo señala la economista senior de la institución, María Jesús Fernández, en declaraciones a Economía Digital, quien alerta sobre el aumento del gasto público en un contexto de desequilibrio de las cuentas públicas, teniendo en cuenta que el proyecto presupuestario recoge una previsión de una deuda del 115,1% del PIB, frente al 119,5% de este, y un déficit del 5% el próximo año, frente al 8,4% con el que podría cerrar el ejercicio actual.
La advertencia va en la línea del Consejo General de Economistas (CGE), que ya avisó el pasado jueves sobre el posible aumento del déficit público hasta el 9% del PIB y de la deuda pública hasta el 121,5% del PIB como consecuencia del aumento del gasto por las medidas de los Presupuestos “expansivos” de 2022 y los factores no previstos de un menor crecimiento y una alta inflación que mermarán la recaudación.
«El Gobierno no quiere tener en cuenta el elevado volumen de deuda»
Para Fernández (Funcas), el aumento del gasto público recogido en las nuevas cuentas públicas, al alza más allá del relacionado con los fondos europeos, muestra que el Gobierno no prioriza enviar una señal de corrección de desequilibrios a pesar de que en 2023 entrará en principio de nuevo en funcionamiento el Pacto de Estabilidad.
Ante el regreso de las reglas fiscales europeas que marcan una ratio de deuda pública del 60% del PIB y un déficit público del 3%, Fernández considera que el Gobierno debe diseñar ya un plan «creíble de consolidación de las cuentas públicas. «Con los Presupuestos el Gobierno no es consciente o no quiere tener en cuenta que tenemos un volumen de deuda muy elevado y hay que empezar a reducir el déficit estructural en algún momento», lamenta.
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, promete demostrar que es posible la salida de la crisis aumentando el gasto (es decir, manteniendo el carácter expansionista de los PGE) a la vez que disminuye el déficit y la deuda pública gracias al crecimiento y las medidas de la reforma fiscal que verán la luz «a lo largo de 2022 y en 2023».
Ingresos optimistas
El Gobierno aprobó el pasado jueves el proyecto de Presupuestos Generales del Estado de 2022, que cuentan con un ‘techo de gasto’ récord de 196.142 millones de euros y de nuevo el mayor gasto social de la historia (248.391 millones de euros), así como récord en inversiones por más de 40.000 millones de euros.
El gasto público récord recogido de 458.970 millones, un 0,6% más, incorpora 27.633 millones de fondos europeos consignados, un 3,8% más, y se sustenta en la previsión de obtener los mayores ingresos públicos de la historia.
Todo este aumento del gasto público se sustenta bajo la previsión del Gobierno de conseguir unos ingresos no financieros (antes de cesión a entes territoriales) récord de 279.316 millones, un 10,8% más, y de 182.903 millones tras cesión a entes, un 20,6% más.
Dentro de estos, los ingresos tributarios subirán un 8,1%, hasta el hito de 232.352 millones de euros gracias a la reactivación económica lograda por la vacunación y la recuperación de la actividad tras las restricciones, con una estimación de que el PIB crecerá un 6,8% este año y un 7% en 2022.
La economista senior de Funcas ve también un «poco optimistas» esa estimación de ingresos. Cabe recordar que el INE rebajó el crecimiento del segundo trimestre del 2,8% al 1,1%, y ello ha llevado a disminuir las previsiones a todos los organismos. En el caso de Funcas, augura un repunte del PIB en 2022 de entre el 5,5% y el 6%.
La cifra es inferior al que calcula el Gobierno por el menor impulso del crecimiento de este año. El CGE también disminuyó la semana pasada su previsión al 5,8% este año y la mantiene en el 6% el próximo año tras la rebaja del INE.